Tegucigalpa, Honduras
El sueño de cientos de hondureños de tener una vivienda propia en óptimas condiciones fueron derrumbados por empresas irresponsables que mediante la estafa se agenciaron millonarias cantidades de dinero.
El Ministerio Público (MP), a través de la Fiscalía Especial del Consumidor y la Tercera Edad, comenzó a investigar una serie de empresas constructoras de viviendas en la capital que presuntamente han estafando a la población.
Según la investigación, se trata de 12 empresas que vendieron casas a un alto costo, pero con el pasar de los días muchas de ellas comenzaron a presentar daños y en muchos de los casos hasta se derrumbaron. Lo imperdonable es que, pese a que los clientes han pagado por sus viviendas, varios tuvieron que abandonarlas porque fueron declaradas inhabitables.
La Fiscalía del Consumidor ha identificado viviendas con humedad, paredes agrietadas y lotes de terreno que tienen hasta tres hipotecas, las cuales han sido liberadas después de haber sido pagadas.
Las residenciales investigadas por la Fiscalía son la residencial Zarahemla 1 y 2. En este caso, los dueños del proyecto tienen un proceso judicial pendiente para responder por las irregularidades en la construcción de las casas.
Además, figuran la residencial Los Olivos, que se ubica en la salida al departamento de Olancho. En este proyecto, sus ejecutores incumplieron con las fechas de entrega de las viviendas, y las que fueron entregadas presentan hundimientos y en otros casos no han sido finalizadas.
Más de L40 millonesha recuperado la Fiscalía del Consumidor por este tipo de estafas |
A la lista se suma la residencial Laureles Real, ubicada en las cercanías de la colonia Francisco Morazán en Comayagüela, en donde sus dueños incumplieron una serie de requisitos para la construcción de las edificaciones, las cuales han reportado una serie de daños.
La residencial San Andrés, situada a la salida de la zona sur de la capital, colindante con la colonia Santa Rosa, también está en la lista de la Fiscalía. A pesar de que la zona fue declarada inhabitable, los dueños del proyecto promovieron la construcción de viviendas en ese lugar.
En este caso, varios ciudadanos fueron estafados porque pagaron por los hogares de sus sueños, pero estos nunca fueron edificados.
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En la zona sur también se encuentra la residencial Enmanuel, donde varios de sus habitantes tuvieron que huir del lugar porque las paredes de sus casas se desplomaron.
EL HERALDO tuvo acceso a la denuncia de varios pobladores de estas residenciales, quienes siguen pagando la cuota ante bancos prestatarios y han tenido que alquilar otras casas porque las que les vendieron son inhabitables.
La investigación también incluye a la residencial El Tablón, ubicada en la zona sureste de la ciudad, la cual enfrenta un proceso investigativo en su contra por la pésima construcción del proyecto.
Este proyecto se levantó en una zona de alto riesgo con una amenaza baja de deslizamientos, pero los vecinos ya están sufriendo el mal proceder de los ingenieros. A esto se suma la carencia de drenaje de aguas lluvias y un sistema deficiente de aguas negras.
La lista la engrosan la residencial Valle de Ilamapa y El Diamante, ambas con procesos judiciales pendientes, por su mala ejecutoria al momento de construir las viviendas.
Uno de los casos que ya obtuvo una condena en los tribunales fue Ciudad del Ángel, pero aún los dueños del proyecto siguen prófugos de la justicia. Finalmente, figuran los dueños de la residencial París, que se encuentra en pleno proceso de juicio oral y público por sus malas ejecutorias en la construcción de viviendas.
