Comayagua, Honduras
Tomar un refrescante jugo de caña y comer un dulce batido son manjares típicos que obligan a viajeros nacionales y extranjeros a hacer una parada en el municipio de Taulabé.
Este apetecible alimento se vende como pan caliente a pasajeros del transporte interurbano y familias que viajan en sus carros particulares por el Corredor Logístico desde Comayagua, Siguatepeque, Taulabé, el Lago de Yojoa y San Pedro Sula.
Pero es en los municipios de Taulabé y San José de Comayagua donde se origina y procesa este producto que también representa una fuente de ingreso para las personas que lo venden.
Todo comienza en los cultivos de caña de azúcar en varias comunidades de ambos municipios, producto que es llevado a las moliendas, donde se extrae el jugo y se fabrica el dulce batido.
Procesamiento
EL HERALDO visitó la molienda de Camilo Doblado Hernández, es una de las más conocidas ya que se encuentra a orillas del Corredor Logístico, a unos 10 minutos de las Cuevas de Taulabé, viniendo de norte a sur.
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En su negocio, la gente puede observar cómo se extrae el jugo utilizando una máquina artesanal llamada trapiche, que consta de dos rodillos de metal, un palo de madera y un lazo que va atado a un caballo. Cuando el animal camina se mueven los rodillos y trituran la caña.
De inmediato, el jugo va saliendo de la máquina hacia un recipiente. Pero lo que más encanta a los visitantes es que pueden poner un vaso y tomar del jugo recién salido del trapiche.
“La idea surge de querer hacer un centro recreativo turístico donde las personas que salen a pasear puedan ver el proceso original de lo que se hace en una molienda”, dijo Hernández.
El entrevistado expresó que su objetivo es tener un restaurante, bar y áreas de recreación sin perder el estilo original de la molienda.
Dulce
El jugo que es extraído del trapiche es trasladado hacia un horno para ser cocinado por varias horas a fuego lento hasta que empieza a hervir y el líquido se vuelve espeso.
Luego, la mezcla es vertida sobre pequeñas pailas redondas y se deja reposar por unos 15 minutos hasta que alcance un punto entre blando y duro.
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Al tener la dureza necesaria, la persona encargada empieza a cortar la orilla del batido con pequeños pedazos de manera afilada para separar el dulce de la paila.
“Tengo varios años de experiencia haciendo batidos, es una manera de sobrevivir de varias familias en este municipio ya que se vende mucho a las personas que viajan”, dijo Tomás Moreira, trabajador de la molienda de don Camilo Hernández.
A nivel de Taulabé hay alrededor de unas siete moliendas dirigidas por 200 familias que se dedican a la venta de dulce.
En los municipios de San José de Comayagua y Taulabé, por cada manzana de caña cultivada se pueden fabricar más de 4,000 rapaduras de dulce de panela.
La rapadura es distribuida en los mercados de Comayagua, Siguatepeque, San Pedro Sula, Tegucigalpa, La Esperanza y Yuscarán