Choluteca, Honduras
Si hay algo de lo que los sureños se sienten orgullosos es de la belleza y la biodiversidad con que cuenta el fascinante Golfo de Fonseca.
Las playas de origen volcánico, sus manglares y la variedad marina que existe en la zona permitieron que el archipiélago alcanzará el título de sitio Ramsar 1000, ante la cantidad de flora y fauna que existe, y que permanece como un misterio debido a la poca investigación científica que se realiza en el sitio.
Sin embargo, la construcción del primer centro para la investigación marina del Golfo de Fonseca en Honduras vendrá a desvelar esos misterios que esconden las aguas del pacífico hondureño.
La obra es impulsada por el Comité para la Defensa y Desarrollo de la Flora y Fauna del Golfo de Fonseca (Coddeffagolf) y financiada por el Ministerio Federal de Cooperación Económica de Alemania a través de Gespa E.V., y estará ubicado en la isla de El Pacar, jurisdicción del municipio Amapala.
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Del centro marino
El proyecto, valorado en 3.5 millones de lempiras, permitirá la construcción de un edificio central en donde funcionará la sala de investigación, un espacio para capacitaciones, cabañas para la estancia de los investigadores, baños, comedor, senderos, quioscos y mirador así como dos muelles para el arribo de embarcaciones.
Saúl Montúfar, coordinador de fortalecimiento de Coddeffagolf, explicó que el proyecto será completamente amigable con el ambiente.
“La estructura será de madera, tendremos energía a través de paneles solares y trataremos el agua residual para que el Golfo de Fonseca mantenga su belleza”, aseguró el entrevistado.
Coddeffagolf solo espera la entrega del licenciamiento ambiental para comenzar su edificación, el cual se ha retrasado a causa de los cambios en el gobierno central.
El impulso al sector turismo desde la instalación del centro de investigación permitirá que los visitantes aprecien más el golfo y sus riquezas.
Jorge Luis Reyes, coordinador de manejo ambiental y área protegida de Coddeffagolf, aseguró que se realizan alianzas con diversas instituciones para que tanto científicos como estudiantes puedan visitar el establecimiento, una vez que sea construido.
“La visión del proyecto es que desde aquí se pueda impulsar el otorgamiento de becas para estudiantes y científicos nacionales y extranjeros y así favorecer el estudio de la diversidad marina”, dijo.