COMAYAGUA, HONDURAS.- A sus 28 años Juan Onail Castillo, carpintero y ebanista, espera con nervios y mucha ansiedad la hora de cargar entre sus hombros el anda con el Cristo Yacente en la Procesión del Santo Entierro de este viernes.
Para Castillo, participar en esta procesión es la oportunidad de pedir al Supremo Redentor del mundo el perdón de sus pecados y la purificación de su alma.
“Es mi primera vez y (siento) un poco de nervios y ansiedad porque no es cualquier cosa lo que se carga, uno siente el peso de nuestros pecados y uno va rezando y purificándose, hacemos oración al corazón y pidiendo al Señor que nos purifique”, expresó.
Junto a Castillo, 34 hombres y mujeres de diferentes edades que pertenecen a la Hermandad de los Caballeros del Santo Entierro serán los encargados de portar el anda procesional con el Cristo Yacente. Cada persona que participa la motivan diferentes circunstancias.
En el caso de Darwin Vásquez, viene participando en la procesión desde el 2014 y lo hace como agradecimiento a Jesús por haberlo sanado de una depresión profunda que lo tenía sumido en la tristeza.
“En el 2014 inicié a cargar el anda por promesa ya que me encontraba mal de salud, había caído en depresión profunda y le dije al Señor que me restaurara, me sanara y el señor escuchó mis oraciones”, manifestó Vásquez.
Agregó que este año es una nueva oportunidad de demostrar su amor y gratitud a Jesús por los favores hechos en su vida personal.
Comayagua, lista
Previo a la salida de la procesión, el obispo de la Diócesis de Comayagua, Roberto Camilleri, oficia una misa con el Cristo crucificado en una cruz de madera.
Luego proceden a bajar la imagen de la cruz, la colocan en una superficie plana para después subirla al anda procesional.
La vestimenta de los caballeros del Santo Entierro se caracteriza por portar un traje color negro con saco y corbata en señal de luto.
El recorrido que realizan inicia en la catedral Inmaculada Concepción a partir de las 6:30 de la tarde, luego pasan por la calle conocida como El Calvario, los mercados, la iglesia La Merced y retornan a la catedral después de cuatro a cinco horas de procesión.
El cansancio físico que puedan sentir los Caballeros del Santo Entierro es muy poco en relación con la satisfacción que sienten en su interior por participar en una de las procesiones más emblemáticas y concurridas de la Semana Mayor. Este es solo el preámbulo que demuestra que Comayagua está lista para lucir su esplendor religioso.
Y es que a la salida del anda de la catedral se congregan en las afueras de la Plaza Central León Alvarado más de 5,000 personas entre nacionales y turistas.
En todo el recorrido, los Caballeros del Santo Entierro son acompañados por una multitud de personas.
Han habido años en donde la lluvia ha caído justo en el momento de iniciar el recorrido, pero eso no ha disipado el espíritu y la fe de las personas que sin retroceder un paso acompañan la procesión de principio a fin.
Meses de trabajo
Por tres meses, los miembros de la hermandad han estado trabajando en elaborar el anda procesional que saldrá mañana Viernes Santo.
Este año se elaboró un nuevo cofre con madera de color y varios detalles para depositar la imagen del Cristo.
Darwin Almendares, mayordomo del Cristo Yacente, expresó que el anda tiene 9.5 y tiene un diseño sencillo ya que para ellos lo más importante es lograr evangelizar a la gente por medio de la procesión.
“El año pasado se sacó un diseño sencillo al igual que este año, ya que no se puede hacer algo pomposo porque lo que se lleva es a Cristo muerto y lo importante es tener la convicción de lo que se hace y lo hacemos como una forma de evangelizar para los que aún no creen en Cristo”, declaró Almendares.
Dijo que las personas que portan el anda deben ser mayores de edad y estar comprometidas y conscientes del significado de la actividad.
Uno de los últimos trabajos de preparación realizado por el mayordomo y algunos miembros de la hermandad fue la unción de los algodones que se entregarán el Viernes Santo a los feligreses.
Esta actividad consiste en mojar los algodones con una loción especial y pasarla por el cuerpo de la imagen del Cristo Yacente.
Previo a la unción, el mayordomo con su familia y algunos miembros de la hermandad hicieron una oración frente al cofre que protege la imagen del Cristo, ubicado en la sacristía de la catedral.
“Yo tengo unos cinco años de hacer este actividad de ungir los algodones con un líquido especial que no daña la imagen del Cristo”, declaró.
Cabe destacar que para este viernes a partir de las 8:30 de la mañana también dará inicio el Santo Vía Crucis saliendo de la iglesia San Francisco y pasando por la zona procesional, la cual estará tapizada con alfombras de aserrín multicolor elaborada por artesanos e instituciones.