El próximo martes, cuando se les presente un informe detallado, las autoridades del Instituto Nacional Agrario (INA) conocerán sobre el paradero y el estado en que se encuentran los tractores que fueron donados por el gobierno de Venezuela en la administración del exliberal Manuel Zelaya Rosales.
Darwin Cálix, subdirector de la institución, se reunió la mañana del martes con Aldo Cardona, presidente del Centro de Mecanización Agrícola Campesina (Cemac) y los ocho presidentes regionales de la misma organización.
“El objetivo de la reunión fue exclusivamente para conocer dónde se encuentran los tractores, cuántos tenemos en buen estado y en concreto en qué condiciones se encuentran”, dijo Cálix.
“El presidente del Cemac es el que va a informar en concreto sobre por qué los tractores están en malas condiciones y que el informe arroje lo que nosotros como representantes de la institución y confederaciones campesinas queremos escuchar”, aseveró el subdirector del INA.
Aclaró que al sector campesino solo se le entregaron 95 tractores “y eso es lo que tenemos en la actualidad”.
“Las confederaciones están presionando para que se brinde un informe de manera inmediata sobre dónde y cómo se encuentran los tractores, porque uno de los errores que se dio con la administración anterior de César Ham es haberse divorciado de las confederaciones campesinas”, aseguró Cálix.
Pero es del criterio que la intención del exministro “no fue mala”, pero se cometió ese error “y ahora estamos viendo las consecuencias de ese error que está provocando un enorme malestar dentro del sector campesino organizado”.
“Todos los tractores venían sencillos, ninguno venía con doble tracción. Extraño realmente porque para la topografía nuestra necesitamos tractores con doble tracción”, comentó el subdirector del Instituto Nacional Agrario.
Otro problema que se ha detectado es que los tractores no venían con un kit completo de repuestos y son tractores con motores que consumen mucho combustible, lo que consideran los campesinos como “deficiencias”.
“Cuando se fue a Venezuela a ver esos tractores que nos iban a dar, alguien, no se quién, ya había clasificado y seleccionado los tractores y todos venían sencillos”.
“Es ilógico y no podemos nosotros pretender echar andar un verdadero proceso de desarrollo en el campo si toda la maquinaria no trae doble tracción”, se quejó Cálix.
Otro de los problemas que enfrentan las autoridades del INA es que los miembros del Cemac reclaman una deuda de más de tres millones de lempiras.
Aducen que pagaron cambio de aceite de su propia bolsa, compraron repuestos e hicieron pago de vigilantes para impedir que los tractores fueran desmantelados.
Ante esos reclamos, las autoridades del INA piden que existan los soportes necesarios de facturas y liquidaciones para pagar esa deuda.
