Al menos cinco personas fueron detenidas este jueves en La Ceiba, Atlántida, al norte de Honduras, al estar relacionadas al ataque contra un bus de la empresa de transporte Cristina ocurrido el martes pasado y que dejó una mujer y dos supuestos pandilleros fallecidos.
Los capturados fueron identificados como Cristian Antonio Reyes Salinas, (22), alias 'Chagui', originario y residente de la Ceiba, Rosibel Ocampo Martinez, (29), originaria de Colón y residente en la Ceiba y compañera de hogar de Reyes Salinas); y Michael Vidal Monnar Bush (24), originario y residente en La Ceiba quien sería puntero dentro de la estructura criminal.
Igualmente, se le dio captura a Rolando Portillo Amador (55), originario de Choluteca y residente en la Ceiba, de oficio enfermero; y Linda Julissa Portillo Espinal (24), originaria y residente en La Ceiba, de oficio enfermera.
La acción fue ejecutada por elementos de Dirección Policial de Investigaciones (DPI), Policía Preventiva, Fuerza Nacional Antiextorsion (FNA), Grupo de Operaciones Cobras y miembros del Ejército de Honduras.
'La operación, se ejecutó de manera coordinada con el Ministerio Público e iba orientada a identificar los responsables de varios hechos criminales, ocurridos en los últimos días, entre ellos el atentado perpetredo a una unidad de transporte de la empresa Cristina', señala un comunicado de las fuerzas del orden.
A los sospechosos se les decomisó siete celulares, de diferente marca y modelo, para efectos de investigación.La DPI informó que abrió un proceso investigativo en contra de Cristián Antonio Reyes Salinas, ya que en base a evidencia y testimonios de testigos protegidos ha sido identificado como uno de los que supuestamente participó en el atentado e incendio de una unidad de transporte.
También se le sigue proceso a Rolando Portillo Amador y su hija Linda Julissa Portillo Espinal, ambos de oficiops enfermeros, porque supuestamente asisten y prestan atención médica clandestina a los miembros del barrio 18.
'La Policía Nacional continuará realizando acciones en forma conjunta con todos los organismos que conforman Fusina, a fin de capturar a personas, miembros de maras y pandillas que estén involucrados en hechos criminales, que alteren la paz de la ciudadanía hondureña', advirtieron.
El atentado se perpetró el pasado martes cuando la unidad se dirigía a bordo de pasajeros de La Ceiba a Tegucigalpa en la Carretera CA-13, a inmediaciones del Río Danto.
Fue en ese momento cuando ocho individuos encapuchados bloquearon el paso al bus interurbano, bajaron a los pasajeros y empezaron una ráfaga de disparos en plena calle contra el vehículo.
Muy cerca, miembros de la Policía Militar y del Orden Público (PMOP) escucharon el relajo en la vía pública, por lo que decidieron actuar y responder con una nutrida balacera para detener a los criminales.
En el intercambio de disparos murió uno de los supuestos pandilleros, cuyo cuerpo quedó tendido en el pavimento junto a su arma AK-47 y cerca de la unidad.
En la lluvia de balas pereció de forma circunstancial la hondureña Rosa Davidia Chicas y su esposo resultó herido, quienes circulaban en un vehículo particupar mientras ocurría el atentado criminal.
Horas después se conoció que otro de los pandilleros había fallecido en el Hospital Reginal de Atlántida. Javier Enrique Hernández fue ingresado de emergencia, pero murió por la gravedad de las heridas.
Los ataques contra el transporte público han incrementado este año. En abril pasado un conductor de esta misma empresa, identificado como Manuel Gómez, fue asesinado a manos de dos sicarias que se subieron a la unidad como pasajeras.
En esa ocasión, el sangriento hecho quedó registrado por la videocámara del autobús, hecho que ayudó con la captura de una de las asesinas, conocida como La China.
Y un día después de lo ocurrido en La Ceiba, se registró el incendio de otro bus en La Entrada, Copán, al occidente de Honduras.