TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Salió huyendo de la capital hacia la zona oriental para salvar su vida, pero veinte días después, su cadáver fue encontrado semidecapitado en el barrio Las Lomitas de El Paraíso.
Eso fue lo que le ocurrió a la joven Sandra Nicol Mejía Arriola de 18 años de edad.
Una fuente policial de la zona oriental dijo a EL HERALDO que el 99 por ciento de homicidios donde decapitan a la víctima “están relacionados con maras y pandillas”, eso por la manera como ocurrió el atroz crimen.
El alto oficial detalló que “esta muchacha (Sandra Nicol Mejía Arriola) estaba vinculada a una estructura criminal de maras y pandillas”.
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“De acuerdo con nuestras investigaciones, las que ya se encuentran muy avanzadas, ella se vino huyendo de Tegucigalpa y tenía veinte días de estar acá oculta en El Paraíso, pues temía que le quitaran la vida”, detalló la fuente.
Manifestó que la jovencita “vivía en Tegucigalpa con la abuela, quien la castigaba mucho y desafortunadamente no la pudo corregir”.
Según el entrevistado, Sandra Nicole “se dedicó a andar en la calle, consumía drogas y no la pudieron controlar”.
Los agentes de la Policía Nacional realizan las averiguaciones del caso para identificar y capturar a los responsables del reprochable crimen y también determinar las verdaderas causas por las que le quitaron la vida.
Escena
El cadáver de Sandra Nicol Mejía Arriola fue encontrado sobre un charco de lodo y sangre en una solitaria calle.
La jovencita fue casi decapitada y dejaron su cuerpo abandonado en una de las calles de acceso al conflictivo barrio Las Lomitas de El Paraíso.
En el lugar de la escena se encontró su cartera y un machete con el que se presume que le quitaron la vida.
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El cuerpo de Mejía Arriola fue trasladado a la morgue de Tegucigalpa por personal del Ministerio Público para que se le practicara la autopsia correspondiente y luego ser entregado a los familiares para que le den cristina sepultura, tomando en cuenta los protocolos de bioseguridad establecidos por el Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (Sinager).
El último informe del Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (OV-UNAH) indica que más de 55 mujeres han sido asesinadas durante el confinamiento por la pandemia del coronavirus en el país.
