De carácter 'rebelde' e 'imprudente', Sofía Trinidad Alvarado Muñoz, hermana de Miss Honduras Mundo, desatendió en reiteradas ocasiones las advertencias que su familia y amigos hicieron sobre Plutarco Ruiz, el presunto autor material e intelectual de su muerte.
'La perdono por llevar a María José a su muerte. Ella no era una mala persona, pero era ingenua y confiaba y escuchaba más a sus amigos que a su familia', dijo su madre, Teresa Muñoz, al diario Daily Mail mientras recordaba las incontables ocasiones en las que advritió a su hija sobre los peligros que corría con Ruiz.
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'Yo quisiera que ella hubiera escuchado mi consejo. Mis hijas estarían vivas y no tendríamos miedo de nuestras vidas. Todo mundo que la quería le advirtió que esto terminaría mal', lamentó.
Y es que Plutarco Ruiz no era el primer hombre problemático con el cual Sofía mantenía una relación.
Muñoz relató que Sofía conoció a Lesvin Fernández en una feria de Santa Bárbara, en el occidente de Honduras, cuando ella tenía 18 años. El hombre de 29, había abandonado a su esposa y era un borracho. Aunque en un principio ella se negó a salir con él, terminó por convencerla.
'Le dije que no era adecuado para ella, que era demasiado viejo y que no era una buena persona, pero ella no me escuchó. Empezaron a salir en secreto'.
Fernández fue asesinado hace ocho meses. Él y Sofía habían vivido un año juntos hasta entonces.
Cuando el padre de las hermanas Alvarado enfermó de cáncer de estómago en 2012 y luego falleció, doña Teresa se vio sola, criando a sus tres hijas y fue entonces cuando comenzó a perder el control sobre Sofía.
Salía con más frecuencia y permanecía lejos de casa por más tiempo, en ocasiones llevando a María José con ella.
La señora Muñoz dijo cómo otra tragedia familiar afectó profundamente a las chicas, cuando su padre Oscar fue diagnosticado con cáncer de estómago en 2012, y murió sólo seis meses más tarde.
'Sofia nunca quiso decirme con quién o dónde estaba. Ella nunca contestaba el teléfono cuando la llamaba, tampoco los mensajes de texto. Tenía que pedirle a María José que la llamara, porque solo a ella le contestaba las llamadas'.
Como mormona devota, llevó a las jóvenes a la iglesia y estaba encantada cuando ambas fueron bautizadas en la fe al final del año pasado.
Pero esto no hizo que Sofía frenara sus salidas o relaciones peligrosas.
Juan Francisco López, presidente de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en Santa Bárbara, dijo que la señora Muñoz buscó ayuda varias veces para su hija descarriada.
'Hubo un momento en que su madre pidió ayuda a las hermanas de la iglesia, que trataron de hablar con Sofía a causa de la compañía que ella estaba manteniendo. Ella había dejado de ir a la iglesia', comentó.
Y agregó que 'hicimos todo lo posible para convencerla de volver al camino correcto. Pero ella tenía libre albedrío y no podíamos obligarla a cambiar. Su madre hizo todo lo posible para ayudarla. Si hubiera hecho caso a nuestras palabras y retomar las enseñanzas de su madre y la iglesia, creo que probablemente ella y su hermana todavía estaría vivas hoy'.
Advertencias sobre Plutarco
En septiembre pasado, Sofía comenzó a salir con Plutarco Ruiz. Él era un estudiante en una de las clases de bachillerato para adultos que impartía la joven.
Cuando la señora Muñoz descubrió la relación, consultó a una amiga residente en San Vicente Centenario, donde él también residía, sobre su compartamiento.
'Ella me dijo que eran conocidos como una familia ligada al narcotráfico, que eran personas violentas y que su padre y su hermano habían sido asesinados a causa de su participación en carteles de la droga'.
Su amiga reveló además que el hermano de Ruiz era un mujeriego que había dejado a muchas jóvencitas embarazadas en el pueblo y que Plutarco no era diferente.
'Me senté con Sofía y le dije lo que mi amiga había dicho y ella se sorprendió al escuchar esto. Le dije que tenía que romper la relación porque era una persona peligrosa que tenía que hacerlo poco a poco para evitar cualquier problema. Esa vez ella me escuchó y estuvo de acuerdo conmigo'.
Un mes más tarde, Sofía se enteró de que Plutarco embarazó a una joven de 17 años en su pueblo y le dijo que debía cuidar de ella y del bebé, concentrarse en su nueva familia. Pasó un mes y la madre creyó que la relación había terminado, pero él volvió a buscarla.
'Recuerdo haber escuchado a María José diciéndole que no cayera en la trampa de nuevo, que debía olvidarse de él. Incluso comenzó a conducir delante de nuestra casa en su camioneta, haciendo presión. Finalmente se convenció Sofía de ir a su fiesta de cumpleaños e incluso para hornearle un pastel', relató.
'El día antes de la fiesta, cuando estaba haciendo el pastel aquí en la casa, pero le preocupaba que no le gustaría. María José le dijo que si él realmente la amaba como él dijo, le gustaría el pastel, como fuera'.
El cumpleaños se celebró el jueves 13 de noviembre, en un balneario de Arada, Santa Bárbara, donde de acuerdo a las investigaciones policiales Plutarco dio muerte a las dos hermanas en un ataque de celos.
En la pista de baile fueron encontradas dos perforaciones de bala, mientras dentro del local la Policía de Honduras encontró varias evidencias que incriminarían a Ruiz y a otras cuatro personas en el asesinato.