San Pedro Sula, Honduras
Porque el Ministerio Público no presentó pruebas que desestimaran su estado de inocencia, el Tribunal de Sentencia absolvió por el delito de encubrimiento a Rigoberto Zambrano, quien fue acusado en el caso del asesinato del periodista Herlyn Espinal.
Ayer a las 9:30 am en la sala 4, los jueces leyeron el fallo en el que indicaron que las pruebas presentadas durante el juicio solo permitieron construir los hechos en los que murió el periodista.
Manifestaron que entre las fechas 18 y 19 de julio de 2014, Herlyn Espinal recibió cinco heridas por proyectil de arma de fuego que le causaron la muerte por laceración cerebral.
El cuerpo fue encontrado entre las aldeas de El Chaguitón y La Danta, de Santa Cruz de Yojoa.
Según el fallo, el 24 de julio de 2014 agentes de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) realizaron un allanamiento en una hacienda de la aldea El Batey de Santa Cruz de Yojoa, cercana al lugar donde fue encontrado muerto Espinal.
El hallazgo
Dentro de la hacienda, los detectives encontraron escondidas cinco camisas cerca de una cisterna, de las cuales una de ellas, color rosado con manchas de sangre, era la que andaba puesta Herlyn Espinal antes de ser asesinado, lo cual fue confirmado con los análisis de sangre que hizo Medicina Forense.
Rigoberto Zambrano era uno entre varios trabajadores de la hacienda donde fueron encontradas las prendas de vestir, pese a ello solo él fue detenido el mismo día del allanamiento.
La Fiscalía de Delitos contra la Vida acusó primeramente por el delito de asesinato a Rigoberto Zambrano, pero un juez con jurisdicción nacional modificó el delito a encubrimiento con base en las pruebas presentadas en la audiencia inicial.
La Fiscalía apeló la resolución y la Corte de Apelaciones confirmó el auto de prisión por el delito de encubrimiento en contra de Rigoberto Zambrano.
Los tres jueces de la sala 4 del Tribunal de Sentencia afirmaron que durante el juicio la Fiscalía no presentó prueba que fuera capaz de demostrar que Rigoberto Zambrano tuviera conocimiento de la existencia de las camisas que fueron encontradas en la hacienda y menos que fuera él la persona que las haya ocultado.
“Únicamente se acreditó que era el encargado del lugar, pero que había otras personas que trabajaban en la hacienda, por lo que no es posible asegurar participación alguna en el ocultamiento de esas prendas”, añadieron.
Según los jueces, con lo presentado en el debate se logró ver que Zambrano colaboró en todo momento con los investigadores y autorizó que ingresaran a la hacienda.
Durante el juicio oral y público, la Fiscalía presentó las declaraciones de agentes que hicieron las investigaciones que señalaron que Rigoberto Zambrano quiso ocultar el lugar donde estaban las camisas indicando que en el agujero había una serpiente.
En la hacienda, en la cual Rigoberto Zambrano era capataz, trabajaba Juan Carlos Acosta Meléndez, alias “El Peludo”, quien meses después fue acusado por el asesinato del periodista Herlyn Espinal, pero apareció muerto.