TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Otra extraña muerte se registró la noche del reciente domingo tras confirmarse el fallecimiento de un aspirante a soldado, de 18 años, después de realizar ejercicios físicos, informaron las Fuerzas Armadas de Honduras.
Con este deceso ya son siete en menos de 40 días, entre aspirantes y tenientes, que extrañamente mueren después de realizar alguna exigente práctica física.
Adonis Ardón Zavala, de 18 años de edad, es el séptimo deceso confirmado a las 9:45 del reciente domingo, según el reporte de las autoridades de las Fuerzas Armadas (FF AA).
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“Es probable que sea por shock séptico respiratorio más falla multi orgánica, el aspirante a tropa recién había realizado ejercicio físico”, explicaron.
El fallecido aspirante a tropa estaba asignado al Centro de Adiestramiento de las Fuerzas Armadas (CAMFFAA), propuesto del sexto Batallón de Infantería.
Extrañas muertes
Hace una semana se registró la muerte de los efectivos del Ejército, Nelson Humberto Álvarez Pérez y Germán Josué Morales Toledo, quienes perdieron la vida supuestamente mientras realizaban una prueba física en uno de los cuarteles militares de la zona norte del país.
Sin embargo, esta situación ya se venía dando desde que un elemento policial murió en similares circunstancias -mientras realizaba entrenamiento- en las instalaciones del Comando de Fuerzas Especiales, conocido como Los Cobras, ubicado en la colonia 21 de octubre en Tegucigalpa.
El fallecido fue identificado como Humberto Castillo Pérez, de 45 años de edad, según lo confirmó el director de comunicaciones de la Secretaría de Seguridad, Miguel Martínez Madrid.
No obstante, estas muertes se desencadenarón desde el pasado 11 septiembre cuando tres hondureños perecieron cuando realizaban pruebas físicas en la Academia Nacional de Policía (Anapo).
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Entre los fallecidos se encuentra Jairo Josué Martínez Cruz, quien ya trabajaba en la Secretaría de Seguridad, estaba asignado al departamento de Telemática, ya que era licenciado en informática y fue el primero en fallecer tras el incidente.
La segunda víctima respondía al nombre de Ronal Javier Coello Coello y su muerte se produjo horas más tarde en el Hospital Militar.
Coello Coello era abogado y se desempeñaba como procurador legal de la Secretaría de Seguridad en el departamento de Copán.
La tercera víctima se reportó días después cuando Kevin Mejía, tras luchar por su vida y estar en condición crítica murió.
“Kevin era un médico, padre, esposo, que buscando una mejor vida es víctima de la tragedia de la Anapo”, señaló uno de sus familiares.
Más preguntas que respuestas
Ante la incredulidad de los familiares de los fallecidos por algunos dictámenes forenses, otras personas sospechan que se oculta información, mientras que el titular del Comité de los Derechos Humanos de Honduras (Codeh), Hugo Maldonado acusó que es debido a las vacunas del covid-19.
Según Maldonado un efecto rebote estarían produciendo las vacunas anticovid tras las extrañas muertes de los aspirantes a oficiales de la ANAPO y un agente en el comando de Fuerzas Especiales.
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“Esa trombosis se debe seguir en los estudios médicos y científicos porque la vacuna nos está haciendo un efecto rebote”, analizó Maldonado.
Con criterio antagónico, el doctor Carlos Umaña desacreditó esta posición de Maldonado.
“Cuando uno no es un investigador y no conoce del tema con todo respeto, es mejor abstenerse de dar declaraciones”, pidió.
“Para muestra, un último estudio demostró que los que tuvieron covid tienen 8 veces más riesgo de problemas que los vacunados”, argumentó.