SAN PEDRO SULA, HONDURAS.- Un niño de apenas 14 meses de edad falleció ayer en el hospital Mario Catarino Rivas de San Pedro Sula tras haberse comido un pan que tenía veneno para ratones.
El trágico hecho sucedió el pasado jueves en una colonia de Choloma donde el pequeño Esmelin Javier Reyes Perdomo, quien recién había comenzado a caminar, encontró un pedazo de pan que tenía un veneno en polvo para los ratones y se lo comió.
El pequeño cuerpo del menor de 14 meses fue cargado por su padre en un ataúd negro luego de que muriera en el hospital Mario Rivas producto del daño que le ocasionó el veneno.
Vómitos
Según sus parientes, el niño luego de ingerir el pan casi de inmediato comenzó a presentar vómitos, su cuerpo temblaba y se desvanecía por lo que en su desesperación familiares lo llevaron a un hospital privado.
Al ser atendido y considerando su estado de gravedad sus padres tuvieron que llevarlo al hospital Mario Rivas donde fue atendido.
“El convulsionaba bastante y solo le inyectaban para el dolor”, dijo una de las parientes.
Esmelin Javier no aguantó y murió la madrugada de viernes en el Mario Rivas donde las autoridades forenses, fiscalía y agentes de investigación hicieron el reconocimiento.
Los parientes consternados retiraron el cuerpo de la morgue de Medicina Forense, donde fue llevado por parte de las autoridades para practicarle la autopsia.
El cuerpo del menor, según los parientes, iba a ser trasladado a Santa Bárbara, donde es velado para luego ser sepultado.
La familia del pequeño había utilizado veneno en polvo para matar ratones, el cual colocaron en pan.
Esmelin Javier en un momento de descuido tomó el pan y se lo comió, según dijeron familiares.
Según los expertos, los diferentes tipos de venenos para matar ratones contienen anticoagulantes que en los seres humanos debilitan la habilidad del cuerpo para coagular la sangre, ocasionando con esto hemorragias y complicaciones cardíacas cuando no son tratados en tiempo y forma adecuada.