Los restos mortales del pequeño Rodis Eduardo Peralta Rivera fueron retirados la tarde de este lunes del Departamento de Medicina Forense de la capital de Honduras, por sus familiares.
El pequeño murió la mañana de hoy, luego de recibir un disparo en la cabeza en una confusa balacera que se produjo en la Aldea Nueva Suyapa de la capital de Honduras.
De acuerdo a las informaciones, Peralta Rivera estaba sentado en las afueras del Instituto Monseñor Jacobo, a la espera de sus padres, ya que había pedido permiso de salir por presentar problemas de salud.
El padre del menor contó a los medios de comunicación, que el cuerpo de joven menor será velado en su casa de habitación, pero que mañana se irán rumbo a Choluteca, donde será sepultado.
Hasta el momento, las autoridades solo han capturado a uno de los presuntos responsables del asesinato del menor, sin embargo, hasta ahora no han establecido qué fue lo que paso en la zona.
La persona detenida responde al nombre de Darwin Antonio Escober (21).
