TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Apenas 24 horas de haber recobrado su libertad tenía Óscar Josué Lagos (31), el hombre que fue asesinado anoche en una cuartería de la colonia Villa Lucrecia en la capital de Honduras.
La víctima había estado recluida en la Penitenciaría Nacional de Támara los últimos años y fue el día domingo cuando finalmente salió libre para reunirse con su familia, sin embargo cuando se disponían a dormir fue sorprendido por sus victimarios.
“El domingo estaba feliz porque ya tenía su carta de libertad”, relató un familiar a EL HERALDO.
El hombre fue sacado de su casa en horas de la noche y acribillado a disparos en el mismo lugar por sujetos que llegaron expresamente a matarlo con armas automáticas.
Este día familiares y amigos del occiso retiraron sus restos de la Morgue del Ministerio Público para darle cristiana sepultura.