TEGUCIGALPA, HONDURAS.-Wilson José Berríos enfrenta su situación con una actitud positiva. El joven presenta una leve evolución tras la fuerte explosión de un mortero que le causó severos daños en su rostro.
Wilson, de 18 años de edad, ha recuperado el habla y, según sus familiares, ha pronunciado algunas palabras para comunicarse.
La situación en la que se encuentra ha reafirmado su fe en Dios, la que había perdido luego de la muerte de su hermano hace algunos años. Aseguró que siente la presencia del Creador junto a él, que no lo deja de la mano.
“No me importa quedar feo, siempre que Dios guíe mi camino”, le confesó Wilson a una enfermera en el Hospital Escuela (HE), donde estuvo interno cinco días.
El muchacho está enfrentando su situación con una actitud positiva, la prueba es que un familiar narró que escuchó que el joven hacía reír a las enfermeras que lo atendían.
Wilson Berríos, padre del joven, manifestó que se ha seguido comunicando con él mediante papel y lápiz.
Le escribió en una hoja: “Te amo papi, tengo ganas de trabajar, quiero editar videos, voy a superar al maestro (haciendo referencia a su padre)”, contó Wilson Berríos en una entrevista en Q’Hubo Tv, medio de comunicación donde labora.
Padre e hijo también lograron comunicarse a través de la siguiente conversación:
Wilson (padre): “Hijo, un niño contó que les ayudaste a salir de brincolín de la Villa Navideña, que los protegiste”.
Wilson (hijo): “Yo no podía dejar que dañaran a un niño”.
La tragedia que le cambió la vida al muchacho ocurrió el pasado miércoles a las 8:00 de la noche cuando laboraba en una recreovía de la Villa Navideña que se inauguraba ese día en la Plaza de la Solidaridad en Choluteca.
Un grupo de manifestantes de oposición al gobierno llegaron a protestar y lanzaron piedras y morteros conocidos como cebollas. Por desgracia, uno de esos cohetes estalló en el rostro del muchacho.
Wilson José perdió su ojo izquierdo y tiene la nariz destrozada. Con el ojo derecho puede ver poco, pero no lo va a perder, indica la evaluación del oftalmólogo.
El joven fue trasladado el lunes pasado a mediodía en una ambulancia de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Escuela (HE) hacia el Centro Hondureño para el Niño Quemado (Cehniq).
En ese hospital administrado por la Fundación por la Vida del Niño Quemado (Fundaniquem) permanece en una sala especializada y es vigilado constantemente. Este martes será operado nuevamente.
Investigación
Pese a que las autoridades policiales nombraron dos equipos para investigar el ataque del que fue víctima Wilson Berríos, a cinco días del hecho, aún no hay resultados concretos.
La falta de respuestas por parte de los entes investigativos y de seguridad ha causado malestar entre familiares, amigos y la población hondureña, quienes exigen que el caso no quede en la impunidad.
“Las investigaciones están avanzadas, no podemos revelar mucha información para no entorpecer la misma, pero sabemos que los equipos están haciendo su trabajo y más temprano que tarde se puedan presentar los resultados esperados”, dijo Emil Martínez, vocero policial de Choluteca.
Mientras se esperan noticias sobre quiénes son los responsables del ataque a Wilson Jr, la población continúa apoyando económicamente para su recuperación.