TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Los buses del transporte público en la capital, sobre todo las unidades amarillas, ya no son útiles para brindar el servicio.
Ejemplo de esta situación fue una unidad a la que se le desprendió su eje trasero cuando iba en marcha por la tercera avenida de Comayagüela.
Según Gerardo Aguilar, transportista de la capital, en los últimos años se ha logrado reemplazar más de 1,000 unidades de buses amarillos a ejecutivos que resultaban obsoletos.
“Actualmente no estamos en las condiciones para renovar más unidades por la crisis económica del país, la cual se ha agudizado más por la pandemia. Actualmente tenemos créditos en mora y no sabemos cómo salir”, manifestó Aguilar.
Según admitió, todavía resta un 30% de la flota de buses por renovar en la capital.
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