Tegucigalpa,Honduras
Transformar y convertir a sus hijos en ciudadanos de bien con educación es un deseo que prima en los corazones de los padres de familia.
Sin embargo, el futuro para algunos de estos jóvenes se ha vuelto insostenible, por el acecho de algunos grupos antisociales en instituciones que han sido insignes en la capital.
Los tentáculos de la extorsión, violencia, amenazas y sometimiento de algunos niños y jóvenes a grupos criminales han sido golpes que han marcado la educación de la ciudad.
Un claro ejemplo es el cierre definitivo que tuvo el Instituto Modelo en febrero del 2017, dejando a decenas de jóvenes sin esperanza. El 2019 no es la excepción, a pesar de los esfuerzos que realizan las autoridades del Estado, la inseguridad aún tiene sus raíces y parece no dar retroceso.
Este es el caso del Instituto Central Vicente Cáceres, en el que a diario maestros y autoridades luchan por combatir este cáncer. Como si se tratara de centros penitenciarios, instituciones como el Vicente Cáceres, Jesús Milla Selva, Técnico Honduras, Policarpo Paz García y otros se mantienen bajo constante resguardo de militares.
Alarma
EL HERALDO conoció que de los 1,134 centros educativos que tiene el Distrito Central (DC), unos 381 se ubican en sitios que son asediados por maras y pandillas.
Se estima que del total de los centros antes mencionados, el 12% se encuentra en regiones lideradas por los integrantes conocidos popularmente como Mara 18.
Mientras que el 21% se encuentra en regiones peleadas por la Mara Salvatrucha. En el caso del 66% de las otras instituciones están establecidas en lugares donde no existe peligro inminente de estos grupos antisociales. Las autoridades de la Secretaría de Educación en la dirección de Prevención y Rehabilitación Social informaron a EL HERALDO que desde el 2014 hasta finales del 2018 se generó en Francisco Morazán un total de 110 denuncias de diferentes tipologías de violencia.
“Son pocas las denuncias, debemos de promover la cultura de la denuncia, es importante que padres de familia, profesores y autoridades de estos centros puedan denunciar esta problemática”, dijo Maritza Amaya, subdirectora general de Prevención y Rehabilitación Social.
En tanto, Mario Rivera, portavoz de la Policía Militar del Orden Público (PMOP), comentó que a través de la Fuerza de Seguridad Interinstitucional Nacional (Fusina) se realiza a diario patrullajes en al menos 15 instituciones con alta vulnerabilidad en violencia. “Por razones de seguridad no podemos revelar datos de cuántos son los efectivos que destinamos para estas labores.
Los efectivos militares permanecen en los alrededores de los centros educativos”, añadió Rivera. En operativos, los militares han decomisado marihuana y otras sustancias ilegales.