Tegucigalpa,Honduras
Los números y las letras forman parte de su educación, pero las notas musicales, los colores y el dibujo marcan la esencia en la formación de 912 alumnos de la capital.
En el Distrito Central funcionan cuatro emblemáticas instituciones que, además de enseñar las asignaturas del Currículo Nacional Básico, forman a estudiantes en una especialidad artística.
Uno de los centros educativos que ya tiene cuatro décadas de fundación y 36 promociones de egresados es la Escuela Experimental de Niños para la Música, localizada en la colonia Hato de Enmedio. Este centro escolar imparte clases a 275 niños que provienen de varios sectores de la ciudad, aldeas y municipios aledaños. Los niños son educados en la interpretación de instrumentos como violín, guitarra, teclado y piano.
En el centro educativo trabajan 18 docentes de los cuales ocho se dedican a la formación musical y el resto en las otras materias. “Este tipo de escuela para niños es la única en Tegucigalpa, ocupamos apoyo en mejorar las instalaciones físicas e instrumentos”, dijo el docente Fernando Ortiz.
Esta escuela no es la única. Los niños que concluyen su primaria pueden continuar sus estudios en el Conservatorio Nacional de Música Francisco Ramón Díaz Zelaya, el que también tiene su sede en la colonia Hato de Enmedio.
En la actualidad, 137 alumnos reciben aprendizaje en la interpretación de instrumentos de viento, percusión y cuerda.
Los estudiantes ingresan desde las 7:00 de la mañana y concluyen sus clases a las 3:00 de la tarde.
En el centro educativo hay 25 docentes que imparten clases, de los cuales 19 son maestros de música.
El ritmo y la armonía también cautivan a 300 alumnos de la Escuela Nacional de Música, localizada en la colonia Villa Olímpica y que también forma parte de esta modalidad educativa-artística.
Artes plásticas
El dibujo, la pintura, la escultura y el diseño gráfico han llamado la atención de 200 alumnos de la Escuela Nacional de Bellas Artes (ENBA). El principal reto de este centro educativo es que la mayoría de los alumnos son de limitados recursos económicos, y que la mayoría proviene del interior del país, por lo que deben pagar materiales y hasta alquiler para acudir al centro de formación. Óscar Portillo, director de la ENBA, explicó que este año se ha ayudado con una beca a 18 alumnos, pero que en realidad se requiere becar al menos 100 educandos.
Para apoyar la formación en estas áreas, Miguel Raudales, de la Dirección Departamental de Educación de Francisco Morazán, informó que desde febrero de este año y por primera vez, se capacita a 150 docentes por medio de un diplomado en educación artística que finaliza en septiembre.