TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El flujo vial se detuvo y el equipo de EL HERALDO bajó del automóvil para observar qué pasaba: no había sorpresa, la pausa inició -como de costumbre- porque un conductor decidió estacionarse contra el sentido de su circulación, mientras revisaba su teléfono celular.
De acuerdo con la Ley de Tránsito, el “piloto” violentó los numerales 2 y 9 del artículo 100 por estacionarse en vía pública, interrumpir el tránsito y hacerlo “contra vía”.
Asimismo, el numeral 24 del artículo 98 por realizar actividades adicionales a la conducción, es decir, usar su teléfono.
Lo descrito, es apenas una gota de agua en el mar de irrespeto hacia la educación vial y la eterna omisión por desconocimiento o con premeditación hacia la normativa establecida por la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte (DNVT).
Conducción defensiva
Y es que junto a las obras viales mal diseñadas (rotondas, terceros carriles, etc...) y el saturado parque automovilístico, la ignorancia vial y rebelión contra las normas de tránsito se convierten en el ingrediente final de la receta: caos en las calles capitalinas.
Así lo explicó a EL HERALDO el titular de la Gerencia de Movilidad Urbana (GMU), Miguel Mendoza, mientras sugería que la apuesta es la “conducción a defensiva”.
“Existe una negligencia del ciudadano al momento de conducir, también después de obtener la licencia no existe un control adecuado, eso se refleja en la calle no hay cortesía ni conocimiento con las señales de tránsito”, detalló Mendoza.
En su argumento, también enumeró que es común observar conducción sobre aceras, rebasar cuando hay doble línea continua amarilla, giros prohibidos y muchas más.
Por lo anterior, anunció el inicio de una campaña de educación masiva para orientar desde niños hasta los aspirantes a obtener su licencia de conducir.
“Orientamos las charlas a que el método de conducción sea a la defensiva, en el Distrito Central muchos conducen a la ofensiva y le tiran el carro encima a los demás”, indicó mientras ampliaba que enfatizarán en cómo se tienen que comportar los conductores ante una señal vertical u horizontal cuando utilicen las vías públicas.
De acuerdo con el ingeniero, entre las soluciones para evitar maniobras prohibidas e imprudentes de conductores, destaca la instalación de barreras de concreto, sin embargo, esa medida daña el ornato en las calles y bulevares.
Reacción
Indira Ever, portavoz de la DNVT, destacó que uno de los requisitos para los que pretenden adquirir un permiso de conducir es conocer la Ley de Tránsito y la Ley de Embriaguez Habitual.
“Como lo apunta la Constitución de la República ‘nadie puede alegar ignorancia de la Ley’, por eso realizamos campañas con varias instituciones para explicar las señales de tránsito y su significado”, citó mientras reiteraba que por eso existen las sanciones.
Es decir, los futuros conductores tienen que saber sobre altos, cortesía, semáforos, paso de peatón y todas las demás señalizaciones.
En cuanto a la conducción a la defensiva, reiteró que ese método de conducción siempre ha sido la apuesta de la DNVT ya que el que conduce a la ofensiva puede cometer una falta que podría terminar en un accidente de tránsito.
“Supongamos que llega a una intercepción, si no le dan el paso y se mete a la fuerza, y el otro que viene a la ofensiva terminarán en una colisión que por muy pequeña que sea, genera un congestionamiento por la enorme flota vehicular que hay en la capital”, finalizó la entrevistada.