Tegucigalpa, Honduras.- Ayer, miles de hondureños vieron truncada su oportunidad de recibir atención médica debido al feriado otorgado al personal de salud.
Esta decisión afectó a hospitales y CIS de todo el país, limitando los servicios únicamente a emergencias.
La atención primaria y las consultas programadas pasaron a segundo plano, dejando a los pacientes sin sus atenciones ni medicamentos.
El cierre de los establecimientos sanitarios afectó a unos 7,680 pacientes que acuden diariamente a los 64 Centros Integrales de Salud (CIS) del Distrito Central.
Según estimaciones de EL HERALDO, basadas en datos proporcionados por el personal sanitario, estos centros brindan consultas a un rango de 50 a 190 personas al día.
Cabe destacar que las citas en los CIS suelen tardar de uno a tres días en ser programadas para que los médicos vuelvan a revisar a sus pacientes; sin embargo, se desconoce si habrá reposición de citas en estos establecimientos.
Mientras tanto, el Hospital Escuela, uno de los principales hospitales del país, atiende entre 1,000 y 2,000 personas con enfermedades básicas, a quienes sí logró atender por completo.
La decisión de otorgar un día libre al personal médico se dio después de las celebraciones patrias, lo que levantó cuestionamientos sobre las prioridades del sistema de salud.
Si bien el descanso y el reconocimiento del trabajo del personal sanitario son importantes, la falta de previsión y comunicación clara con la población ha dejado a miles de personas en una situación de vulnerabilidad
