TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Un sol rojo, antes del atardecer, indica que algo no está bien en el ambiente; pero unos ojos rojos y ardor de garganta no son más que el cuerpo contaminándose con el aire.
Tegucigalpa y Comayagüela, las ciudades gemelas que conforman el Distrito Central, están cubiertas por una densa capa de humo que poco a poco está enfermando a cada uno de sus habitantes.
Los Centros Integrales de Salud (CIS), durante el sábado y domingo, días en los que la gente casi no acude, y donde es posible que se vea lo mismo durante la semana, están abarrotados por niños y adultos con problemas respiratorios a causa del aire tóxico inhalado.
“Nosotros siempre tenemos abierto los fines de semana, pero la cantidad de personas que vienen hoy (ayer) por consultas es sorprendente; es raro vernos tan llenos. La gente debe cuidarse del humo si no quiere venir aquí”, comentó el personal del CIS Alonso Suazo.
Los otros establecimientos como Las Crucitas, El Manchén, San Miguel, Villa Adela, Villa Nueva, también atendieron varios casos con personas enfermas por el humo denso.
Gilberto Ramírez, director de la Región Metropolitana de Salud (RMS), declaró que “todas aquellas personas que padecen enfermedades como el asma, han sido fumadoras crónicas o cocinan con fogones ya tienen una sensibilización preliminar ante este humo”.
“Las últimas ocho semanas, hemos reportado un aumento en las enfermedades respiratorias. Unas son de origen infeccioso y de este tipo han disminuido. Sin embargo, las incidencias por la contaminación se mantienen y se espera que bajen cuando lleguen las primeras lluvias”, indicó Ramírez.
Panorama ambiental
En los últimos días, la calidad del aire fue catalogada como peligrosa, lo que significó que respirar es símbolo de contraer daños respiratorios. Sin embargo, ayer la Alcaldía del Distrito Central anunció que el índice de medición ambiental bajó de rango.
Ingrid Flores, jefa de la Unidad Municipal de Gestión Integral de Riesgos (UMGIR), aseveró que “el jueves (2 de mayo) tuvimos el pico histórico, es decir, que estábamos en niveles peligrosos; nuestro sistema de monitoreo, en este momento, nos indica que la calidad del aire está en la categoría de ‘No saludable’”.
Flores detalló que en países europeos, cuando el ambiente se torna como en el Distrito Central, los Estados toman medidas urgentes para resguardar la salud de la gente.
“Los gobiernos tienen ciertas leyes de lo que tiene que hacer el país como: teletrabajo, no salir de casa y que los niños no vayan a las escuelas”, aseveró flores.
En concordancia con estas palabras, médicos cómo Carlos Hernández, especialista en niños, indicó que “exponer a los pequeños a este humo o smog (una fusión entre “smoke”, humo, y “fog”, niebla) puede ser un gran riesgo para su salud y lo mejor sería que Educación determinara dar clases virtuales”.
Hernández es del criterio que primero hay que vivir sanos para rendir mejor, tanto en clases como en los trabajos.
“Si se pudiera trabajar desde casa, mejor, pero es de entender que las personas que viven al día no puedan hacerlo; lo mejor es esperar que el humo baje para no enfermarse con la contaminación de los cielos”, apuntó el galeno.
Las recomendaciones para vivir con la capa de humo, por ahora, son: utilizar mascarillas, no ejercitarse al aire libre, cerrar ventanas y puertas, y sobre todo no exponerse
