Tegucigalpa, Honduras.- En la vasta jungla de concreto que es la capital, donde el humo y el ajetreo diario ahogan a los ciudadanos, una nueva carga se arroja sobre los hombros de los consumidores.
El cartón de huevos, ese humilde estuche que guarda la esperanza de un desayuno nutritivo, es ahora víctima de un nuevo aumento en su precio.
Cinco lempiras: esa es la cifra que resuena en los mercados y ferias. Los granjeros anunciaron las alzas, justificando la baja producción y la necesidad de no perder ganancias.
El cartón de huevo grande, que antes se cotizaba a cien lempiras, ahora se eleva a 105.
El mediano asciende de 75 a 80, y el pequeño, que solía ser el refugio de los más pobres, se encarece de 65 a 70.
Ni siquiera la Feria del Agricultor, frente al Estadio, se escapa de este nuevo orden; allí, los precios se reajustan a 85, 75 y 65 lempiras, respectivamente.
“Si nos quejamos, no nos venden. Aquí están las facturas, pero antes de multarnos deberían hablar con los productores y los empresarios del huevo”, se lamentó un comerciante de Comayagüela.
Pero el golpe no se limita a las centrales de abasto. Los supermercados venden el cartón de huevo grande hasta en 110 lempiras, y en caso de oferta, las 30 unidades salen a L105