TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El recurso que permite imaginar, crecer y aprender fue compartido por Santillana Honduras con una donación de 3,392 libros de texto para aquellos niños que no pueden costearse uno y también para llevar a las escuelas un material acorde con las enseñanzas actuales.
Los ejemplares se utilizarán para la campaña insignia de EL HERALDO, La Maratón del Saber, y el proyecto ecológico más grande del país: Escuelas Amigables con el Ambiente.
Dentro de las cajas entregadas por la empresa a EL HERALDO, vienen tomos desde primer hasta noveno grado, además de otros volúmenes que ayudan a comprender el mundo tecnológico y las obras escritas de los mejores autores modernos y clásicos.
Ovidio Erazo, subcoordinador nacional en sistemas de enseñanza de Santillana Honduras, con mucha alegría comentó: “Traemos una donación de materiales educativos de las cuatro unidades básicas: Español, Matemáticas, Ciencias Sociales, Naturales y otras complementarias”.
Erazo destacó que la contribución para los dos proyectos de EL HERALDO asciende a 185,000 lempiras y que el próximo año Santillana seguirá apoyando los esfuerzos del Diario para llegar a los menores de escasos recursos.
El ejecutivo aprovechó el espacio para enviarle un mensaje a la juventud: “Les animo a ser más conscientes con el uso del papel, ya que este material proviene de los árboles. Debemos ser cuidadosos con los libros para retribuirle algo al planeta Tierra”.
Santillana Honduras es un fiel aliado de EL HERALDO. Sus ayudas llegan, a través del equipo de Metro, a aquellos lugares donde nadie quiere ir, sea por temor o por lo mal que están las calles. Pero el compromiso y amor por la educación de los niños propicia que los donativos se entreguen.
El personal de la empresa manifestó estar contento y afirmó estar “al pie de la bandera” para defender, enseñar y cuidar el aprendizaje de los futuros hombres y mujeres que sacarán adelante a Honduras.
La Maratón del Saber llega a las comunidades que más lo necesiten y, desde inicio del año, se entregan las ayudas, como la de Santillana Honduras, para integrarlas en los centros educativos antes del inicio de clases del 2025
