TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Todo gira y gira. Esa es una perfecta analogía para la ingeniería que hace posible el desplazamiento de su automóvil por las calles y carreteras.
Es por ello que las llantas deben mantenerse en perfecto estado y equilibrio, después de todo, son el único punto de contacto entre el carro y el suelo. Cuando surge un desequilibrio en el giro de una rueda, se vuelven perceptibles vibraciones incómodas y la calidad de conducción se deteriora.
Toda llanta necesita balance, pues ninguna, ni siquiera nueva, es perfecta. ¿Cómo y con qué frecuencia debe llevar su carro a balancear las llantas? A continuación, le detallamos las respuestas a estas y otras preguntas relacionadas.
¿Por qué toda llanta necesita balanceo?
El conjunto rim y llanta puede tener diferentes concentraciones de peso en cada sección o área de la circunferencia (sin importar si el automóvil es nuevo o no) y por ello se necesitan pequeños contrapesos metálicos de unos cuantos gramos, usualmente de plomo por ser suficientemente masivos, para que estratégicamente se aseguren en los bordes de cada rim y permitan un rodaje lo más perfecto posible.
Su constitución misma y el desgaste debido al uso normal suele hacer que las llantas pierdan su balance eventualmente. Con un desequilibrio de apenas 6 gramos, usted sentirá los síntomas que aquejan a una llanta desbalanceada.
¿Cuáles son los síntomas de llantas fuera de balance?
Si el desbalance es en ruedas delanteras, usted sentirá sacudidas en el timón de dirección, desde leves vibraciones a velocidades específicas hasta preocupantes movimientos en el sistema de dirección.
Si es en el eje trasero el problema, frecuentemente se sienten vibraciones en los asientos, el suelo de su vehículo y la cajuela posterior.
No menosprecie el daño que esto puede causar, estas constantes vibraciones hacen mella en el estado de los componentes de la dirección y pueden aflojar piezas en soportes de motor, suspensión o tablero, así como desgaste prematuro y no uniforme en la goma de sus llantas.
¿Cada cuánto tiempo debe realizarse este procedimiento?
Si bien el balanceo de llantas debe efectuarse de forma correctiva (es decir, cuando los síntomas del mal funcionamiento son evidentes), lo más recomendable es realizar mantenimiento preventivo y programar una rotación de posición de llantas y balanceo cada 8,000 km o cada cambio de aceite.
Como parámetro mínimo, se recomienda realizarlo una vez al año si usa su vehículo esporádicamente. Empero lo anterior, es imperativo balancear una llanta cada vez que esta ha sido reparada por haber sufrido una pinchadura o balancear las cuatro simultáneamente con cada alineamiento.
Si una llanta está deformada o un rim está dañado estructuralmente debido a algún golpe o accidente, le será imposible balancear correctamente el conjunto y su seguridad estará en riesgo. Haga las reparaciones pertinentes primero y finalice con el preciso balanceo.
¿En qué consiste el correcto balanceo?
Normalmente se realiza en talleres de alineamiento y balanceo, pues ambos procedimientos están ligados y es recomendable efectuarlos simultáneamente.
Alinear tren delantero y trasero es corregir los ángulos de cada rueda respecto de las demás, el suelo y su dirección; es un procedimiento colectivo. Sin embargo, el balanceo es individual y específico para cada llanta.
Primero se coloca la rueda en una máquina que la hace girar a altas revoluciones y cuyos sensores indican dónde exactamente debe quitar o poner (con adhesivos o clips) los contrapesos específicos para neutralizar las diferencias de peso. Se vuelve a hacer girar y ajustar cuántas veces sean necesarias hasta que el giro de la llanta queda perfectamente equilibrado.
Diferencias entre alineamiento y balanceo
Alineamiento y balanceo son dos cosas distintas pero relacionadas. Cuando se alinea un carro se mide la correcta posición de ataque de cada llanta y su relación con su paralela en el mismo eje de acuerdo a las especificaciones técnicas del fabricante de su automóvil.
Luego se cotejan con respecto a las restantes dos ruedas del siguiente eje y se hacen los ajustes en la columna de dirección, tijeras, rótulas, barras y suspensión. El balanceo es específicamente para las ruedas y llantas, de forma individualizada.