Tegucigalpa, Honduras. El volante es un elemento muy importante de su vehículo y es esencial para garantizar el buen funcionamiento de todos los autos.
Una conducción buena y segura es muy importante para evitar cualquier tipo de incidentes. Manejar un auto con mala alineación, balanceo o fallas que alteren el buen funcionamiento del volante es incómodo y pone en riesgo la vida de muchas personas.
Que el volante de su auto se ponga duro al girar es un problema del volante que no da muchas señales tempranas. Por eso, es muy importante saber qué fallas pueden provocar que el volante se ponga duro, así podrá revisar todo y asegurarse que no va a fallar repentinamente mientras conduce.
Una de estas fallas es la fuga de líquido de dirección. En el corazón del sistema se encuentra la bomba de dirección asistida que depende del líquido de dirección hidráulico para hacer posible el proceso. Prácticamente, si la dirección hidráulica tiene el nivel bajo de líquido, esta no funcionará adecuadamente e incluso puede dañar la bomba de la dirección.
La causa más común de dificultad para girar el volante es que no hay suficiente líquido de dirección asistida en el sistema. Esto probablemente sucederá cuando haya una fuga de líquido por una grieta en el área de la manguera presurizada o si esta área se afloja. Hay que tener en cuenta también el espesor del líquido de dirección.
El líquido de la dirección asistida no tiene una vida infinita y también acumula suciedad y escombros con el tiempo. Por lo tanto, es fundamental que lo cambie periódicamente según los intervalos recomendados por el fabricante.
Otro aspecto a considerar es una bomba de dirección asistida averiada. La bomba de dirección asistida es la encargada de transferir el líquido del sistema de dirección a la unidad de piñón y cremallera.
Una bomba que funciona mal no bloqueará la rueda por completo, pero necesitará mucha más fuerza, lo que podría ser peligroso cuando necesite girar bruscamente o en una situación de emergencia.