TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El fútbol es percibido como un deporte que requiere resistencia física y estrategia. Fue creado con el fin de mantener a quienes lo practican en un estado de salud óptimo y para entretener a quienes acuden a disfrutar de los diferentes encuentros entre equipos, sin embargo, desde hace algunos años, en varios estadios de Honduras se ha añadido un detestable elemento: la violencia.
A la fecha son incontables los episodios de violencia protagonizados entre aficionados de uno u otro equipo en los estadios hondureños, si bien es cierto, también han ocurrido en otros países del mundo, en el nuestro se vuelven cada vez más frecuentes, involucrando incluso a personas ajenas a la disputa deportiva.
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Eso fue lo que ocurrió el domingo tras la final de la Liga Nacional de Honduras, donde el Club Deportivo Motagua alzó su copa número 18 tras derrotar al Real España. Mientras los ganadores festejaban y los perdedores comenzaban a retirarse del recinto, un hombre atacó con furia a una agente policial, desatando una ola de indignación en varios sectores de la sociedad. Aquí una cronología de lo ocurrido.
El encuentro
El partido comenzó a las 3:00 de la tarde en el Estadio Olímpico Metropolitano de San Pedro Sula. Como es normal, las barras alentaban a su equipo favorito y el ambiente pronosticaba un juego a la altura de una final.
Tras arrancar el primer tiempo, en la cancha se vivieron momentos de emoción, tensión y goles, que no fueron suficientes para que el Real España lograra coronarse como triunfador, por lo que finalmente, el Ciclón Azul ganó y esto causó rechazo entre varios aficionados contrarios.
Disturbios
Tras que el árbitro pitara el fin del partido, algunos hinchas del Real España comenzaron a protagonizar disturbios en las graderías, e incluso, invadieron la cancha con la intención de agredir a los jugadores del Motagua.
En medio del caos, fue necesaria la intervención policial, pues como en otros encuentros previos, un contingente se encontraba alerta para poner orden ante cualquier hecho alejado de la finalidad del encuentro.
Los jugadores del Motagua se refugiaron en su camerino y tuvieron que levantar su copa número 18 en ausencia de varios de sus seguidores, pues muchos abandonaron el estadio ante el temor de ser agredidos por sus rivales deportivos.
El ataque a la policía
Fue justamente en medio de ese escenario violento cuando en una de las graderías varios agentes de la Policía Nacional intentaban controlar la salida de los hinchas del Real España. Cuando de repente, un hombre que no vestía la camiseta de ningún equipo, vio a la subinspectora Denia Michell Contreras y decidió agredirla.
En un video captado por algún aficionado que se encontraba al otro lado del recinto se observa el momento exacto en el que la mujer de 23 años camina y el atacante la patea en la espalda, provocando que ella caiga aparatosamente por las gradas, desde una altura considerable.
Aunque lo intentó, no pudo detenerse, y cayó a más de 10 gradas de altura. Mientras aún caía, el agresor huyó en veloz carrera hacia la salida, sin poder ser detenido por los demás policías que se encontraban en el lugar o por varios aficionados que miraban atónitos lo ocurrido.
La búsqueda
Lo que siguó después parecía una tarea difícil de lograr. El video que captó la brutal agresión fue difundido una y otra vez en las redes sociales, desatando la indignación generalizada tras cada reproducción.
Mujeres y hombres reaccionaron molestos y pidieron la detención inmediata del agresor y un castigo ejemplar, pues no solo se trataba de un hecho violento que empañaba el fútbol hondureño, sino también un claro irrespeto a la autoridad.
Lamentablemente, al ser tomado a una larga distancia y probablemente con un teléfono celular, las imágenes estaban borrosas. Sumado a eso el rostro del hombre solo aparecía durante pocos segundos. Todos estos detalles dificultaban la búsqueda del sujeto, quien hasta ese momento era un total desconocido.
Una recompensa
Aún así, la misma noche del domingo la Policía Nacional ofreció, a través de sus redes sociales, una jugosa recompensa para quien pudiera identificar al individuo y contribuir así a su pronta detención.
“La Policía Nacional de Honduras ofrece cien mil lempiras de recompensa a quien brinde información del sujeto que atentó deliberadamente contra la vida de una sub inspectora de la Policía”, escribieron en redes sociales, junto a una captura de pantalla del momento de la agresión.
En las imágenes únicamente se podía ver al hombre vistiendo una camiseta gris con una línea horizontal en color negro y otra de color rojo, una gorra del mismo tono y un jeans azul.
Además, garantizaron que la persona que diera información del individuo a través de la línea de emergencia 911 sería protegida con total confidencialidad.
Un rostro
Tras el planteamiento de la recompensa, la Policía Nacional, a través de cámaras de seguridad instaladas en el estadio, obtuvo una imagen más clara del rostro del hombre que pateó a la agente.
“Este es el rostro del agresor de la oficial femenina de la Policía Nacional”, anunció la institución en sus redes sociales, mostrando una imagen aclarada del sujeto.
Horas después los usuarios de las redes sociales hicieron lo propio y ayudaron a identificar al presunto autor del delito: un joven originario de Bonito Oriental, departamento de Colón, pero las autoridades descartaron que se trate de la misma persona.
Más imágenes del responsable
Además, la Policía difundió otra serie de imágenes que fueron obtenidas mediante las cámaras, en las cuales se observa el momento en que el hombre se encuentra afuera del Estadio, con un semblante tranquilo.
Y en otra de las tomas aparece conversando con un hombre vestido con la camiseta del Real España; en una tercera toma se le ve abordando un taxi Toyota, Corolla año 2001, con registro 4849, el cual también era conducido por un hombre que vestía los colores del equipo sampedrano.
Según la información policial, el sujeto estuvo transitando por varias zonas de San Pedro Sula tras abordar el taxi, pero se desconoce dónde fue su última parada y a qué sitio se dirigió después.
Sin embargo, el subcomisario, Cristian Nolasco, aseguró que tras estar plenamente identificado solo “es cuestión de horas para su captura”.
Consecuencias
Es así que tras el condenable hecho las autoridades han comenzado a considerar nuevas acciones que permitan reforzar la seguridad en los encuentros deportivos y que eviten que estas situaciones sigan ocurriendo.
La institución policial anunció que “para tener un mejor control durante futuros eventos deportivos, se contempla solicitar la instalación de sistemas de cámaras de vigilancia, tanto al interior como exterior del estadio Olímpico Metropolitano”.
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