TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El nombre del nuevo presidente del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) continúa en el limbo.
A cuatro días de la asamblea extraordinaria de gobernadores a celebrarse en Tegucigalpa, el guatemalteco Jaime Roberto Díaz Palacios y la costarricensse Ana Guisela Sánchez Maroto, que son los favoritos de los tres candidatos, no han logrado el de los votos requeridos.
Así lo conoció EL HERALDO de fuentes internas del BCIE, quienes agregaron que hay dos bloques de países que respaldan esas candidaturas a la presidencia pero no cuentan con los votos necesarios. Hay un tercer bloque de países fundadores integrado por El Salvador, Nicaragua y Honduras que aún no han definido a quién apoyarán.
El tercer candidato es el costarricense Bernardo José Alfaro Araya, quien fue impugnado por su país por su presunta vinculación en un sonado escándalo financiero.
También hay otra impugnación sin resolver por el directorio y se trata del hondureño Hugo Noé Pino.
Bloques
El guatemalteco Díaz Palacios, actual vicepresidente del Banco Centroamericano, cuenta con el apoyo de Taiwán, que es el socio mayoritario con 11.37% de las acciones. A la lista de países que respaldan su candidatura se suma Corea del Sur, con una participación accionaria de 7.59%, según la información de fuentes internas del BCIE.
La aspirante de Costa Rica cabildea el apoyo de los países extarregionales como México, Argentina, España, Colombia y Cuba, quienes juntos tienen el 17.52% de las acciones. Cada país fundador, o sea los cinco de Centroamérica, tienen 10.68% de las acciones.
Para alcanzar el 51% de los votos, los candidatos necesitan el respaldo del bloque de Nicaragua, El Salvador y Honduras al representar el 32.04% de los votos.
División
Los informantes coinciden que la asamblea de gobernadores estará dividida.
“Creo que viene una discusión sobre el proceso de elección de la terna final que decidió el directorio y la credibilidad del concurso”, dijo una fuente del BCIE.
Agregó que las impugnaciones son por la opacidad del proceso al incluir en la terna a Bernardo Alfaro, ingeniero civil de Costa Rica, por estar señalado en presuntos actos de corrupción. La impugnación del economista hondureño Hugo Noé Pino es por haber sido excluido sin haber considerado su trayectoria profesional.