TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Sentada en el corredor de su casa, doña Amanda esperaba el aire fresco del atardecer para “poder descansar sus piernas”. Eran las 5:00 de la tarde, pero el calor seguía siendo tan insoportable como en pleno mediodía en fechas de verano.
“Este calor me da fogaje en los pies”, comentó con voz pausada. Las temperaturas máximas en Tegucigalpa no son las mismas de hace 41 años; desde 1981 hasta 2022 aumentaron 0.5 grados centígrados, según los registros de la Agencia Hondureña de Aeronáutica Civil (AHAC) y el Centro de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos), analizados por la Unidad de Datos de EL HERALDO Plus.
Con un pañuelo en su mano se soplaba los pies para “refrescarlos” y, en segunda instancia, “alejar los zancudos”, como si el trapo verde cambiaría los 31 grados centígrados que marcaba el estado del tiempo en el teléfono que grababa la conversación.
Ese Domingo de Ramos, cuando la Iglesia Católica inició varias actividades por la Semana Santa, la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) informó sobre el ingreso de una cuña de alta presión que dejaría lluvias débiles en la zona norte, central y oriental de Honduras.
Copeco también advirtió que habría una variación en las temperaturas, que en tiempos de verano parece favorable para una mujer de 84 años, con artritis y problemas de circulación, porque el calor duplica todos sus “males”.
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Cada vez más calor
Doña Amanda sufre el mismo problema varias veces al año, y cómo no, si cada vez hace más calor. En Tegucigalpa las temperaturas máximas se han disparado, al punto que, por ejemplo, el 10 de abril de 2020 alcanzaron los 36.6 grados centígrados, prácticamente lo que se vivió un día promedio en Choluteca en 2021.
Tanto abril de 2020 y abril de 2021 tuvieron los registros más altos, es decir, que las temperaturas máximas estuvieron por encima de las registradas en otras fechas.Cuando hablamos de temperaturas máximas y mínimas, nos referimos al registro más elevado o más bajo en las 24 horas del día.
Las máximas normalmente se alcanzan entre la 1:00 y 3:00 PM, dependiendo de la estación, según explicó el decano de la Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Nabil Kawas.
En cambio, las temperaturas mínimas se producen en la madrugada.
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“Uno aparte de tomar la temperatura de la tarde, empieza a analizar la temperatura de la mañana y al ver ese incremento en la mañana se ve claramente el aumento de la concentración de gases de efecto invernadero”, explicó Francisco Argeñal, director del Centro de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos), en una entrevista realizada en 2021.
Por ejemplo, si tomamos como referencia el 10 de abril de 2020, el día más cálido entre 2020 y 2021, la temperatura mínima que calculó la estación de Toncontín fue de 15 grados centígrados.
Esta no ha sido la más baja registrada en los últimos años, pues los reportes a los que tuvo acceso la Unidad de Datos de EL HERALDO Plus muestran que el pasado 1 de febrero de 2020 la capital alcanzó los 9.7 grados centígrados.
En tanto, en 2021, la temperatura máxima más elevada ocurrió el 26 de abril, cuando hubo 33.5 grados, mientras que la mínima fue el 27 de diciembre, cuando descendieron a 10.1 grados.
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De acuerdo con Kawas, estos números muestran cómo en Honduras aumentan las temperaturas máximas, pero no disminuyen las mínimas, al contrario, también van en incremento.
El catedrático mencionó que en 1956 hubo un día en que la temperatura mínima alcanzó los 3.5 grados centígrados. “Fue la mínima más baja que ha alcanzado Tegucigalpa, pero esa temperatura mínima no se ha vuelto a ver”, comentó.
En Tegucigalpa la media promedio mínima varía por año. Para 1981 (hace 41 años) fue de 17.63 grados, mientras que 2015 alcanzó los 18. Un año después, la media -que es la división de las sumas de las temperaturas mínimas promedio de todos los meses- se mantuvo, pero en 2017 bajó a 17 grados centígrados.
En 2020 y 2021, la media mínima nuevamente alcanzó los 18 grados, muy alejada de aquellos 3.5 grados que alguna vez registró Tegucigalpa y que todavía recuerda el decano de la Facultad de Ciencias de la UNAH.
Si hacemos este mismo procedimiento con las temperaturas máximas, la capital alcanzó 27.7 grados centígrados en 1981, pero un año después subió a 28.06 grados y al siguiente (1983) la media máxima fue de 29.1 grados centígrados.
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En 2020, cuando el país registró los primeros dos casos de covid-19, la media máxima en las temperaturas fue de 28.6 grados, mientras que en 2021 pasó a 28.02.
“Eso tiene que ver mucho con el cambio climático que ha venido a acrecentar los valores extremos”, mencionó Kawas.
Para Alejandra Martínez, una capitalina que vive en una colonia cercana al río San José, cada día es más evidente que las temperaturas aumentan, pues “ni en la casa se puede estar porque se siente mucho calor”, lamentó.
La capitalina, quien nació en los límites del Distrito Central, condenó que decenas de árboles fueran cortados por órdenes de alcaldes anteriores y, a su criterio, eso influye para que las temperaturas empeoren, opinión que compartió el capitalino Hugo Espinal.
El pasado 28 de febrero, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) advirtió en el informe “Cambio climático: una amenaza para el bienestar de la humanidad y la salud del planeta” que el cambio climático es causado por el ser humano y que, incluso, se refleja en las temperaturas.
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“El aumento de olas de calor, sequías e inundaciones ya ha superado los umbrales de tolerancia de las plantas y los animales y ha provocado la mortalidad en masa de diversas especies, como árboles y corales”, advierte el documento.
“Estos fenómenos meteorológicos extremos se producen de manera simultánea, lo cual genera impactos en cascada que resultan cada vez más difícil controlarlos”, continúa, al lamentar que serán cada vez más constantes y hasta irreversibles en los próximos 20 años.
Estaciones
Los reportes a los que tuvo acceso la Unidad de Datos de EL HERALDO Plus mencionan 16 estaciones desde donde se miden las temperaturas a nivel nacional.
Al sacar la media en todos los puntos de Honduras, los resultados nos dicen que desde 1981 hasta 2021 las máximas aumentaron 1.37 grados.
¿Qué significa esto? Bueno, que en el primer año la media fue de 28.82 grados centígrados, pero que en el segundo alcanzó los 30.19 grados.
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En las temperaturas mínimas también ocurrió lo mismo: en 1981, hace exactamente 41 años atrás, la media fue de 20.54 y en 2021 aumentó a 20.6, es decir, 0.6 grados.
Esta variación se registró en todos los departamentos del país, ya sea con temperaturas máximas o mínimas, lo que es más preocupante.
“Ese aumento de uno o dos grados en la media afecta porque se tienen valores máximos de hasta tres o cuatro grados arriba de los valores de hace 20, 30 o 40 años”, deploró Kawas. Esto evidencia que lo que viven los hondureños no es solo efecto del verano, sino que el aumento de temperaturas se reporta en cualquier época del año, incluso en meses como diciembre, enero y febrero.
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