En la miseria están los damnificados por Eta y Iota en Olanchito, Yoro
La empresa a cargo de desarrollar el proyecto, que fue contratada por la UCP, no ha cumplido con las fechas, ya que las más de 500 casas debieron ser terminadas y entregadas el 1 de agosto de 2022
Viviendas a un costo de más de 225 millones de lempiras esperan en Olanchito.
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YORO, HONDURAS.- Eran cerca de las 2:00 de la tarde, el cielo estaba gris y una brisa, como chis chis, rociaba los verdes campos bananeros del sector de Las Minas del Aguán, Olanchito, Yoro, cerca de unas casitas levantadas con pedazos de lámina y restos de madera a la orilla de la calle.
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La imagen inocente de un pequeño niño salió de la oscuridad de la covacha, sus pies estaban descalzos y el lodo helado penetraba entre sus delgados y frágiles dedos a medida avanzaban sus pasos.
Su pantalón estaba curtido y mojado, no vestía camisa, y en sus manos sucias sujetaba con fuerza la mitad de un mínimo verde cocido, era su almuerzo, mientras en su inocente rostro sucio se resaltaban sus ojos tristes como preguntando: ¿Nos darán una casa?La Unidad Investigativa de EL HERALDO Plus llegó hasta esta zona del país, donde las familias afectadas por los fenómenos naturales Eta y Iota tienen más de dos años de estar esperando por su vivienda.
Son dos proyectos habitacionales que se están ejecutando en Olanchito, Yoro, por la Unidad Coordinadora de Proyectos (UCP), creada en el gobierno anterior.
La empresa a cargo de las obras en Olanchito es Russel y Asociados S. de R.L. y como supervisor está a cargo la empresa Cinsa Geo-Consult.
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Avances
Uno de los proyectos es Dos Caminos, que era de 316 viviendas, pero se redujo a 200 debido a que estaba cerca de los campos bananeros y se determinó que los químicos podrían afectar a los habitantes.
Datos de la UCP indican que este proyecto tiene un costo de 89.4 millones de lempiras y ya se han desembolsado más de 42.3 millones, con un avance que ronda el 50%.
El contrato de esta obra indica que estas viviendas debieron ser entregadas el 1 de agosto del año anterior, pero el desarrollador no cumplió, más bien le dieron cerca de un año más de plazo.
Los ejecutivos de la empresa constructora justificaron que debido al cambio de gobierno se revisaron los contratos, además ha habido mal clima y en la zona no se halla mano de obra, ya que muchos jóvenes han emigrado a Estados Unidos.
Estos hechos tan atrasado las obras.Hasta finales de diciembre tenían 96 casas terminadas y solo restaba instalar la energía eléctrica, pero eso ya es responsabilidad de la UCP con el gobierno, quienes deben entregar el documento de propiedad al beneficiario para que la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE) haga la respectiva instalación, según conoció este medio.
En este proyecto, ubicado a un costado de la carretera central, se sigue trabajando y el compromiso de la empresa constructora es entregarlo el 30 de junio próximo.
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Desesperado
Recostado a una lámina de zinc que sirve como fachada de su casita, ya que en la parte de atrás la cubre con pedazos de tela y plástico, don Hernán Murillo tiene la mirada perdida.
“Papá, el agua se sigue metiendo, está lleno de lodo”, le vocifera una de sus hijas desde adentro, pero él nada puede hacer, más que esperar que el gobierno entregue la vivienda que les prometió hace dos años.
“El río nos llevó la casa cuando Eta y Iota, nosotros nos salimos, anduvimos alquilando, pero no teníamos cómo pagar, nos venimos para acá, a la orilla de la calle”, expresó el señor.
También andaba descalzo, con los pies en el lodo húmedo, “estamos preocupados, aquí se nos mete el agua también, usted puede ver”, dijo, mientras invitaba a pasar a su covacha.
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La miseria habla por sí sola: adentro de la casa se forman pequeños charcos, el fuego está encendido pero hay poco para comer y las camas y todo está sucio, pues niños y adultos mayores con enfermedades viven entre el lodo.
Mientras esto sucede, el segundo proyecto de Olanchito, llamado Residencial El Mestizal, ubicado más cerca del pueblo, está igual de retrasado.
Aquí el compromiso era entregar el 1 de agosto de 2022 un total de 304 viviendas, pero hasta diciembre pasado el proyecto no llegaba ni al 50% de avance.
Los ejecutivos de la empresa constructora afirmaron a la Unidad Investigativa de EL HERALDO Plus, en un recorrido por la zona, que ya tienen listas 124 casas para ser habitadas.
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Corresponde a las autoridades de la UCP y del gobierno central la decisión de entregarlas a las familias, ya que ellos solo están a cargo de la construcción de los proyectos.
Esta obra tiene un costo de 135.8 millones de lempiras y hasta la fecha se han ejecutado más de 54 millones, quedan 81.8 millones para terminar la anhelada obra social.
En la parte finalizada, las calles de acceso están pavimentadas, la acometida para la instalación eléctrica está lista y los servicios básicos también fueron instalados.
Al igual que en los demás proyectos, la justificación de la empresa constructora es el mal clima de la zona y la falta de trabajadores calificados.
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Algunos obreros estaban edificando algunas casas y en otro sector se hacían trabajos de compactación del terreno, pero a medio vapor debido a que cuando llegó EL HERALDO Plus se aproximaban las fiestas de fin de año.
El compromiso de la empresa es reforzar los trabajos en enero y así cumplir con el beneficio que les dieron de ampliar los plazos, mientras la gente sufre calamidades.
En total en esta zona del país se están construyendo 504 viviendas, para igual número de familias, a un costo de 225.2 millones de lempiras.
Una queja de los ejecutivos de la empresa es que la UCP les hace desembolsos mínimos de dinero, evitando que ellos puedan invertir y acelerar el proceso de construcción.
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Dentro de este contexto hay casos desconcertantes, como el de Odalma Zelaya, quien participó en los anuncios de campaña del proyecto. “Yo salgo en el anuncio donde supuestamente me daban las llaves de la casa y mire dónde estoy”, expresó, para mostrar la lipidia que la rodea.
Expuso que les han dicho que no les entregan las casas porque se las quieren vender, y eso los tiene más preocupados.
Cuando el equipo de EL HERALDO Plus abandonaba el lugar, un grupo de madres, cargando a sus hijos en brazos, llegaron para rogar por su casita. “Usted, ayúdenos, ya no aguantamos estar aquí, por favor, nos sentimos olvidados”.
Representantes de la Fundación Integral para el Desarrollo de Honduras (Fipadeh), quienes están a cargo de la selección de los beneficiados, aclararon que la gente no pagará por las casas.
Lo que existe es desesperación por las familias, que siguen sufriendo por las lluvias y los proyectos no se han terminado en el tiempo indicado.
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La UCP asegura que terminarán las 2,113 viviendas que faltan
La Unidad Coordinadora de Proyectos (UCP) anunció que las 2,113 viviendas que se encuentran en proceso de construcción serán entregadas a medida que se vaya finalizando cada proyecto.
A pesar de los atrasos que comprobó la Unidad Investigativa de EL HERALDO Plus en las visitas, los ejecutivos de la UCP, por medio de respuestas enviadas a través de correo electrónico, afirmaron que están los recursos para terminar las obras.
“Todos los proyectos que actualmente se encuentran en ejecución serán finalizados”, prometieron las autoridades de la entidad creada en la administración anterior como un ente privado para ejecutar proyectos con fondos públicos.
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Actualmente todos los proyectos se encuentran en ejecución, y se han entregado 108 viviendas correspondientes al proyecto denominado “Anexo Tulipanes”, ubicado en el municipio de Villanueva, departamento de Cortes.
Esto quiere decir que ningún proyecto ha quedado inconcluso, todos se encuentran en ejecución, justificaron.
No obstante, la UCP se desligó de la continuidad del proyecto Lomas del Diamante, es decir, de las casas contenedores y de continuar con las 513 viviendas para ceder el paso a Residencial Morazán.
“La UCP realizo el traspaso del proyecto Residencial Morazán a la Secretaria de la Presidencia, para lo cual ya se realizó el proceso del traspaso documental”, confirmaron.
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Desde el inicio la UCP tenía más de 1,682 millones de lempiras para todos los proyectos de vivienda social.
De estos, 1,200 millones fue el financiamiento que hizo el Fondo Monetario Internacional (FMI) y 482.2 millones saldrían del fideicomiso del Instituto de la Propiedad.
Antes del cierre del año anterior se habían ejecutado 472.9 millones de los 1,200 que les entregó el gobierno para los proyectos, sin incluir Residencial Morazán.
La UCP trabaja en terminar estas obras iniciadas y luego realizar la liquidación de esta unidad, ya que no ha recibido nuevos proyectos.
En total son 221 soluciones habitacionales, edificadas como viviendas independientes y en condominios que se ejecutaron en las zonas afectadas por las inundaciones.
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