TEGUCIGALPA, HONDURAS.-La alarma se encendió ayer en Honduras ante la posible llegada de la viruela del mono al país.
Inicialmente, se había especulado que un hombre deportado de Estados Unidos podría haber traído el virus. Sin embargo, las autoridades sanitarias descartaron que este fuera el caso, enfocando su atención en una familia de cuatro miembros en Belén, Lempira.
La ministra de Salud, Carla Paredes, informó que esta familia comenzó a presentar síntomas, como erupciones en la piel, hace 15 días, mucho antes de que el padre fuera deportado.
“Hace 15 días empezaron a presentar lesiones en la piel, pero no es el sitio usual de las primeras apariciones”, explicó Paredes.
La familia ha estado en cuarentena desde que aparecieron los primeros síntomas y actualmente está bajo estricta vigilancia mientras se realizan los análisis necesarios.
“Inicialmente empezó la madre y luego los otros miembros de la familia. Empezaron a presentar lesiones en diferentes partes de los brazos y tronco”, especificó Paredes.
Una esperanza
A pesar de la preocupación generada, la ministra señaló de manera preliminar que es posible que no se trate de viruela del mono, ya que las erupciones no se presentaron en las zonas del cuerpo donde comúnmente aparece el sarpullido inicial de la enfermedad.
Expertos consultados por El HERALDO confirmaron que, en casos de viruela del mono, el sarpullido suele aparecer primero en la cara, las manos o los pies, y luego se extiende a otras partes del cuerpo.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la erupción comienza con una mancha que luego se convierte en una vesícula llena de líquido. Además, detallan que estas pueden provocar dolor o picazón.
También sostiene que los síntomas se presentan una semana después de la exposición y pueden durar entre dos o cuatro semanas, aunque el tiempo se puede prolongar para las personas con un sistema inmunológico débil.
Un esperado viernes
Los resultados de los análisis que confirmarán o descartarán si la viruela del mono llegó al país estarán listos este viernes, y hasta entonces, el país permanecerá en alerta. “Nosotros esperamos el viernes tener los resultados.
El padre de estos niños vino deportado de Estados Unidos hace cinco días, pero la familia tiene ya dos semanas de presentar los síntomas”, reiteró Paredes.
Baja probabilidad
Tanto la ministra de Salud como el epidemiólogo Tito Alvarado sostienen que hay una baja probabilidad de que los resultados den positivo a viruela del mono.
Cabe destacar que existen dos variantes de esta enfermedad: el clado I y II. Alvarado argumentó que el clado I nunca ha llegado al continente americano: “En este continente nunca se ha registrado ningún caso de la viruela I, por lo que es muy poco probable que se trate de viruela del mono”.
El 8 de agosto, la OMS alertó sobre la circulación de la nueva variante, conocida como MPXV clado I.
El experto comentó que hay varias enfermedades que presentan síntomas similares. “Existen muchas enfermedades que presentan síntomas parecidos, como forúnculos, el virus Coxsackie y la varicela, que también provocan erupciones en la piel”, explicó Alvarado.
A pesar de la incertidumbre, el médico enfatizó en la necesidad de mantener la calma, pero sin bajar la guardia, hasta que los análisis confirmen o descarten la presencia de viruela del mono en el país.
Hay vacuna
Las autoridades sanitarias sostienen que desde 2022, año en que se registró el primer caso de viruela del mono en Honduras, el país tiene bajo su control la vacuna.
Además, garantizaron que esta tiene la capacidad de combatir la nueva variante.
“Contamos con cierta cantidad de lotes, pero no es abierta para toda la población. El clado I tiene sensibilidad a la vacuna”, informó Llich Tovar, coordinador del área de Análisis de la Información de Alerta y Respuesta de la Secretaría de Salud.
