LEPATERIQUE, HONDURAS.- Después de horas de camino, subidas y bajadas llenas de lodo y monte, y con machete en mano para abrir camino por donde no lo había, La Unidad Investigativa de EL HERALDO Plus llegó a la zona cero donde falleció hace cinco años Hilda Hernández junto a cinco personas más en una montaña de Lepaterique, Francisco Morazán.
El terrible suceso ocurrió el 16 de diciembre del 2017, al filo de las 9:47 AM -última comunicación con la torre de control-, cuando las víctimas viajaban en la nave tipo Ecuriel AS35 B3 de la Fuerza Aérea Hondureña desde Tegucigalpa (aeropuerto Toncontín) a Comayagua (base aérea Enrique Soto Cano) y cayeron cuando volaba a 10,000 pies de altitud y 12 millas náuticas.
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Este rotativo después de un intenso sondeo en la zona encontró un curioso objeto que pertenecía a la hermana del expresidente Juan Orlando Hernández.
En la zona cero se construyó un monumento a las víctimas, que es devorado por la maleza, y todavía se hallan vestigios del helicóptero y objetos personales.
¿Qué se encontró?
En una parte de la zona -medio enterrada- estaba un pedazo de cartera color azul oscuro, que bien podría ser un tarjetero.
Al levantarla se pudo observar con total claridad las iniciales “HH” plasmadas en plateado, que por consecuencia la ubican con su propietaria Hilda Hernández.
No solo eso, en la zona EL HERALDO Plus evidenció primero pedazos de hierro retorcidos, uno incluso tenía una parte de la Bandera de Honduras.
Cables achicharrados y partes irreconocibles del helicóptero también saltaron a la vista. Pedazos de alfombra del suelo de la aeronave también se pudieron evidenciar, así como objetos de plástico y piezas difíciles de identificar.