COMAYAGUA, HONDURAS
La extracción de piedras trituradas del río Selguapa, para continuar con las obras de pavimentación en el Canal Seco, ha provocado el malestar de los pobladores de varias comunidades cercanas al lugar de donde se saca el material.
Y es que ahora el río es un desierto de piedras sueltas, con poca agua, peces muertos y con un cauce más amplio que en tiempos de lluvias provoca daños en propiedades privadas que están a la orilla del afluente.
Las labores de extracción se hacen a unos 500 metros de las viviendas en las comunidades de Voluntades Unidas, La Isla y El Taladro, ubicadas el noroeste de la ciudad de Comayagua y donde habitan más de 20 mil personas.
Además, las familias que se dedican a la extracción de arena de manera artesanal manifiestan sentirse perjudicadas porque ahora encuentra poco material para vender.
“Se están llevando los recursos naturales y dejando sin nada el río y nos causa problema porque cuando vienen las lluvias se llevan la tierra de nuestras propiedades, en mi caso se me han caído unas dos manzanas de tierra porque han socavado”, lamentó Modesto Sánchez, líder comunitario de Voluntades Unidas.
Permiso de explotación
La compañía encargada de sacar el material es Prodecom. Según aseguró Francisco Pineda, ingeniero de la empresa, ellos cuentan con los permisos de explotación y licencia ambiental otorgados por el Instituto Hondureño de Geología y Minas (Inhgeomin) para llevar a cabo la labor. Pineda agregó que han tenido acercamientos con dos de las comunidades.
Igualmente detalló que se han comprometido para realizar obras en favor de las comunidades, entre ellas la construcción de un aula escolar y la reparación de la carretera de tierra como parte de la labor social para los pobladores.
Dicha concesión fue dada para aprovechar la piedra y arena del río a lo largo de 2.75 kilómetros para ser usadas en la pavimentación del Canal Seco, a la altura del municipio de San Juan, al sur del departamento de La Paz.
“El proyecto se inició hace unos 10 años extrayendo piedra, pero se había paralizado por falta de fondos y se volvió a reanudar en marzo de este año, siempre con los permisos dados por Inhgeomin”, manifestó Pineda.
El permiso caducará una vez que se explote los 2.75 kilómetros del afluente. El ingeniero agregó que el río Selguapa no se ha secado por los trabajos que realizan sino porque los pobladores no han cuidado los árboles cercanos a la fuente de agua.
Por su parte, autoridades del Departamento Ambiental de la alcaldía comayagüense, declararon que no se podían referir al tema porque desconocen los daños que se estén provocando.
Informaron que harán una inspección para atender las denuncia de contaminación recibidas por pobladores.