Honduras

Dictan prisión preventiva contra personas acusadas de estafar un banco

El Ministerio Público logró procesar a las cuatro personas de una red internacional a quienes se les acusa de estafas electrónicas en contra de un banco
11.09.2024

Tegucigalpa, Honduras.- Un auto de formal procesamiento y prisión preventiva fue dictado este miércoles por los Juzgados en contra de Ayline Jemina Cruz Ortiz, señalada como líder de una red internacional de estafas electrónicas y exempleada de una agencia bancaria, junto a su pareja, Félix Josué Durón. También fueron procesados los exagentes bancarios Delmer Jeovanny Cárdenas Garay y Miguel Darío Domínguez Garay, a quienes se les acusa de los delitos de lavado de activos y estafa continuada.

Las detenciones de los involucrados fueron realizadas el 4 de septiembre por la Fiscalía Especial Contra el Crimen Organizado (FESCCO) a través de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC) durante seis allanamientos, dos en La Ceiba, Atlántida; dos en Morazán, Yoro; uno en Tegucigalpa, Francisco Morazán y otro en San Pedro Sula, Cortés.

Estafas por redes sociales han aumentado en últimos meses en Honduras

Los hechos fueron denunciados por la gerencia de cumplimiento de la institución bancaria entre los meses de abril y mayo del presente año, tras detectar transacciones inusuales provenientes de una de sus agencias. Estas operaciones fraudulentas, realizadas con tarjetas de crédito y débito vinculadas a cuentas de ahorro, generaron un perjuicio financiero superior a los 11 millones de lempiras (L. 11,260,759.39).

Las investigaciones realizadas por agentes de la ATIC revelaron que, luego de procesar las transacciones, los acusados las anulaban, pero mantenían los fondos en sus cuentas personales, retirando el dinero para entregarlo a terceros. De esta manera, ocultaban el origen ilícito de los fondos.

Realizan allanamientos por fraude millonario en institución financiera

La investigación ha confirmado que los involucrados lavaban activos a través de estas transacciones sospechosas, obteniendo grandes sumas de dinero que afectaron los intereses de la institución bancaria y otros sistemas financieros.

La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), adscrita a la Comisión Nacional de Banca y Seguros (CNBS), colaboró en el desarrollo de las diligencias relacionadas con este caso.