Toda persona en algún momento de su vida requerirá contar con un buen récord crediticio. Antes de conocer la forma más directar de crear tu propio récord crediticio o historial crediticio debes conocer lo que esto significa.
Un historial crediticio -en su definición más simple- es la carta de presentación de cualquier cliente ante el sistema financiero.
Es decir el registro de todos nuestros movimientos de crédito (Como cuando compramos un artículo a plazos, un préstamo en efectivo, un financiamiento, o simplemente cuando firmamos un contrato de televisión de paga o nuestro plan de celular).
Si somos responsables y cumplimos con nuestra obligación contraída mantendremos un buen récord y esto nos abrirá puertas a otros créditos que requiramos en el fututo.
Caso contrario si no cumplimos con los pagos, las cuotas, nos retrasamos en pagar las mismas, etc., nuestro crédito se verá afectado y por ende se tendría un mal historial crediticio.
Pero ¿Cómo contruimos nuestro historial crediticio?
Cuando una entidad pone a disposición de un cliente una cantidad de dinero, con un límite fijado, es lo que conocemos como crédito. Ese dinero el cliente lo utiliza según la necesidad del momento, utilizando una cuenta o una tarjeta de crédito.
El cliente paga intereses solamente por el dinero que ha utilizado. La entidad financiera generalmente cobra una comisión mínima sobre el saldo no dispuesto, revela la Comisión Nacional de Bancos y Seguros (CNBS).
El crédito puede ser muy útil, siempre y cuando sea utilizado con moderación y de manera responsable. Al seleccionar una línea de crédito se debe asegurar que satisfaga las necesidades o expectativas según el fin por el que fue adquirido.
Lo recomendable es adquirir un crédito para algo útil como el pago de una deuda total o parcial, para invertir en un negocio, o cubrir los gastos corrientes o extraordinarios en momentos específicos.
Los expertos recomiendan:
1. Realizar un presupuesto que pueda ayudar a llevar un buen control sobre su crédito y manejo gastos futuros.
2. Priorizar a cancelar los saldos pendientes teniendo en cuenta las tasas de interés. Abone primero cuentas con mayor tasa de interés, sin olvidar de pagar por lo menos el pago mínimo en sus cuentas menores.
3. Al contraer una deuda debemos estar seguros de tener capacidad para pagarlas.
4. Revisar opciones de pago y la más adecuada para pagar a su término.
5. Pagar más del pago mínimo, con abonos adicionales a la cuota mínima puede reducir el saldo total de la deuda de una manera más rápida y pagando menos interéses corrientes. Trate de pagar sus cuotas a tiempo para evitar el pago de intereses moratorios.
6. Lleve el control de los pagos. Revise siempre su estado de cuenta y verifique que los movimientos (compras) reflejados realmente hayan sido efectuadas.
7. Si está en problemas, hable con su entidad financiera. Antes de entrar en mora, acuda a su entidad y propóngale un acuerdo de pagos.
8. Nunca pierda de vista su tarjeta porque uno de los delitos más comunes es la clonación de las tarjetas de crédito y debito para cometer ilícitos.