TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El escritor hondureño Eduardo Bähr partió hoy a lo ignoto. Su obra que navega entre la literatura, el teatro y el cine, es sin duda un legado que queda para la posteridad.
Bähr, falleció en Tegucigalpa tras una penosa enfermedad. Sus restos están siendo velados en la funeraria San Miguel Arcángel de la Alameda y su sepelio será mañana al mediodía en el cementerio del mismo nombre ubicado en Las Casitas.
El escritor hondureño cuya obra cumbre “El cuento de la guerra” fue traducido a varios idiomas y obtuvo en 1970 el Premio Nacional de Literatura Martínez Galindo, nació en Tela, Honduras, el 23 de septiembre de 1940.
Se graduó de Lengua y Literatura en la Escuela Superior del Profesorado, ahora Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán y en 1975, obtuvo un posgrado en Letras Hispánicas en la Universidad de Cincinnati, Ohio, Estados Unidos.
Eduardo, quien también fue director de la Biblioteca Nacional, fue miembro del Consejo de Dirección de varias revistas de arte y letras, como Alcaraván, Presente, Astrolabio y Galatea.
Además, desde 1965 forma parte del Teatro Nacional y de distintas compañías de teatro. En 1995 recibió la Medalla Gabriela Mistral del Gobierno de Chile, con la que se galardonó por esta única vez a 50 intelectuales alrededor del mundo, entre ellos Carlos Monsiváis, Octavio Paz, Rafael Alberti, Mario Benedetti y Elena Poniatowska, entre otros.
Su legado
Fue profesor de literatura en dos universidades hondureñas, en las que además dirigió dos compañías de teatro universitario, Teatro de la Escuela Superior del Profesorado entre 1965 y 1981 y Teatro de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, entre 1989 y 1991. Y miembro del Consejo de Dirección de varias revistas de arte y letras, como Alcaraván, Presente, Astrolabio y Galatea.
Su obra incluye cuentos y guiones de teatro. Desde 1965 hace parte del elenco estable del Teatro Nacional y ha actuado en las compañías del Teatro Universitario de Honduras, dirigido por Francisco Salvador (1978); el Teatro Infantil de Honduras, dirigido por Mercedes Agurcia; del Teatro Universitario La Merced, dirigido por Rafael Murillo Selva (1975-1977) y del Teatro Zambra, dirigido por Jacques Borbault del Theatre Du Soleil, de París como director invitado (1989).
Mientras que su trayectoria como actor de cine incluye las películas Utopía o El Cuerpo Disperso y El Mundo al Revés, una ficción dirigida por Raúl Ruiz (1976); No hay Tierra Sin Dueño de Sami Kafati, (1978); El Viaje de Suyapa, cortometraje de ficción dirigido por Katia Lara (2007); y como actor en el videoclip La Casa de La Justicia, de Karla Lara dirigido por Katia Lara (2006).
Además, obtuvo el premio a Mejor Actor por su papel en “Santitos” del director Ángel Maldonado en el Festival Internacional de Cortometrajes de EL HERALDO.
Fue jurado en diversos concursos de narrativa breve, entre ellos el Concurso de Cuentos Cortos inéditos Rafael Heliodoro Valle de EL HERALDO.
Bähr fue también miembro de Artistas de la Gente, un colectivo de cinco intelectuales de distintas generaciones y disciplinas diversas que desarrollaron una crítica artística con contenido político.
Descanse en Paz, Eduardo Bähr.