TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La mejora de la infraestructura, la contratación de docentes vía concurso, la transformación de las escuelas normales y el cumplimiento de los 200 días de clases serán, entre otros, los objetivos a perseguir en el sistema educativo en 2019.
Ayer diversos sectores encabezados por el gobierno de la República, con el acompañamiento de la sociedad civil, corporaciones municipales, sector magisterial, academia, empresa privada y cooperantes acordaron unir esfuerzos para establecer una hoja de ruta encaminada a mejorar la calidad de la educación en los diferentes niveles a corto, mediano y largo plazo.
El compromiso fue pactado en la sede del Poder ejecutivo con participación del presidente, Juan Orlando Hernández, el ministro de Educación, Arnaldo Bueso, los miembros de la Comisión de Transformación de la Educación, cooperantes, alcaldías, dirigencia magisterial y sociedad civil, entre otros. Entre los compromisos asumidos se establece una transformación en la infraestructura educativa a nivel nacional.
En Honduras, en la actualidad existen 26,149 centros educativos, de los cuales 23,917 son públicos y 2,232 privados.
De acuerdo a datos proporcionados por las autoridades de Educación, el 85 por ciento de los establecimientos públicos se encuentran en mal estado, por lo que se realizará una reestructuración con una inversión aproximada de 3,500 millones de lempiras. Dichos recursos serán adquiridos por el gobierno a través de la Tasa de Seguridad.
“Ya estamos trabajando en mejorar las escuelas y vamos en los próximos dos meses a potenciar este trabajo y asegurar que podamos seguir avanzando más rápido, ya que vamos a remodelar y construir nuevas escuelas”, dijo Arnaldo Bueso, titular de Educación.
“Es imposible tener todas las escuelas listas este año, pero hay un plan que vamos a presentar”, detalló.
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Proyecto
El ambicioso proyecto para mejorar la educación en Honduras contempla otros puntos donde se destaca el fortalecimiento de capacidades de los maestros, trabajo directo con las corporaciones municipales, el rescate de la representación de los padres de familia y todo el esquema de cooperación de los donantes y sociedad civil.
A corto plazo se pretende desarrollar un nuevo sistema de matrícula en el cual se va a facilitar la inscripción de los niños a través de una conexión directa con el Registro Nacional de las Personas para que la partida de nacimiento automáticamente se pueda visualizar, lo que permitirá el ahorro de tiempo y dinero a los padres de familia, pues en la actualidad cada año se pide una partida de nacimiento de los estudiantes para matricularlos.
En cuanto a la participación de las alcaldías o gobiernos locales, lo que se pretende es que se involucren de manera directa y que eso permita sumar la mayor cantidad de niños que asistan a los centros educativos. En los últimos años la matrícula en el sistema educativo ha superado los 2 millones de educandos.
En 2015 la población estudiantil fue de 2,027,432 alumnos. El 2016 se contabilizaron 2,032,593 y en 2017 la matrícula tuvo una disminución ya que se matricularon 2,028,700 alumnos a nivel nacional.
Pretención
En esta oportunidad se pretende que haya un significativo incremento en la matrícula desde el nivel de preescolar hasta el nivel secundario.
3,500millones de lempirasinvertirá el gobierno en el sector Educación. |
Para ello las alcaldías que reciben las transferencias del gobierno deben hacer el aporte donde se establece que el 40 por ciento de lo que reciben del gobierno se debe invertir en educación.
En cuanto a la deserción escolar, Bueso detalló que para evitar que los niños dejen de asistir a los centros educativos es fundamental la participación de los padres de familia y los gobiernos locales, “porque si no logramos la apropiación de estos actores, difícilmente vamos a poder lograr que los niños y las niñas se matriculen o que permanezcan en clases”.
En los últimos tres años la deserción escolar se ha incrementado en el país. Para el 2015 se registraron 48,288 casos de estudiantes que abandonaron sus estudios, en 2016 se contabilizaron 59,354 casos y en 2017 la deserción escolar fue de 69,977, incrementándose en 10,625 los casos de estudiantes que abandonaron sus estudios.
Con el trabajo que se va a desarrollar se pretende bajar la incidencia de deserción en los diversos niveles.
Otro de los factores que contempla la iniciativa es la contratación de al menos 3,000 maestros a fin de año, debido a que existe déficit del personal docente. La contratación de los maestros se llevará a cabo en el mes de noviembre cuando se realicen los concursos para optar a las plazas que estarán disponibles en el sistema educativo nacional.
En Honduras, en 2016 se contabilizaban 26 mil maestros que estaban desempleados y que concursaban por las plazas, pero ninguno era contratado porque no se habían creado las estructuras presupuestarias.
Para este año, la promesa de las autoridades es que se va a disponer de los recursos económicos necesarios para la contratación de los docentes a nivel nacional.
Las autoridades educativas prometen “puertas abiertas” con el sector magisterial, por lo que a partir de la próxima semana se va a empezar a realizar una serie de reuniones para conocer los puntos de vista del sector docente y establecer un camino común para avanzar en la mejora de la educación.
En relación a la seguridad en los centros educativos ubicados en las zonas consideradas de alto riesgo, la Secretaría de Educación coordinará con Seguridad y trabajará en un esquema que permita identificar las escuelas que están en zonas de peligro para realizar acciones que contribuyan a la seguridad de los inmuebles, alumnos, docentes y padres de familia.
En el caso de las escuelas normales, se acordó agilizar los fondos que se requieren para lograr que estas comiencen a funcionar como centros de formación docentes.
“Se están cimentando las bases de un nuevo esquema educativo”
El presidente Juan Orlando Hernández anunció este jueves que el país trabaja en el establecimiento de las bases para tener una nueva plataforma que permita a los hondureños tener una educación de calidad con metas a un corto, mediano y largo plazo.
“Se trata de un compromiso que permita realizar las reformas educativas que necesita el país en materia de desarrollo económico”, detalló el mandatario.
“Este es un momento crucial para Honduras, por cuanto todos los países que avanzaron a mejores niveles de vida para su gente comenzaron priorizando la educación”, comentó.
“Hace unos meses ratificamos el Pacto Social por la Educación en este mismo lugar (Casa Presidencial) y este viernes estamos alineando todos los esfuerzos en favor de la educación. Se están cimentando las bases de un nuevo esquema educativo; hemos avanzado de a poco, pero falta mucho porque la deuda es enorme”, detalló.
“No vamos a mejorar en índices de violencia si no trabajamos también en educación; es construir valores y principios en los corazones de las nuevas generaciones”, enfatizó.
“Esta tarea es gigante y no solo es responsabilidad del gobierno, por lo que pido el apoyo de la población”.