Luis Alfonso Santos, exobispo de la Diócesis de Copán, está seguro de rescatar los sellos del Partido Liberal con su corriente de Auténticos Liberales 28 de Junio. Para gobernar el país, dice este líder religioso, no se necesita pregonar el socialismo del siglo XXI, lo importante es estar conscientes de lo que se va a hacer en materia social para disminuir esa enorme brecha que hay en Honduras entre ricos y pobres.
El aspirante presidencial respondió las preguntas de EL HERALDO antes de ingresar a una reunión política en un hotel capitalino.
¿Por qué se quedó en el Partido Liberal? ¿Por qué no siguió los pasos de Manuel Zelaya si siempre estuvo con él y exigió su retorno?
Mire, lo que pasa es que Manuel Zelaya ya fue presidente y de acuerdo al artículo 239 de la Constitución de la República, el que ha ostentado la magna magistratura de la República ya no puede volver mientras no se reforme este artículo. Y yo pienso que a “Mel” le conviene que yo llegue a la Casa Presidencial porque si llego con dos terceras partes de los diputados podemos hacer los cambios en la Constitución que nosotros queremos. Y ahorita hay un apoyo popular increíble. Esa es la razón.
Luego, a mí quienes me hablaron de candidatura han sido los del Movimiento de Auténticos Liberales 28 de Junio. Yo he estado en la resistencia a los golpes porque creo que en Honduras cada vez que alguien hace algo en favor de las mayorías se le da golpe de Estado. En mi vida he sufrido cinco golpes de Estado, entonces yo nunca voy a estar de acuerdo con un golpe de Estado. En el caso de “Mel” Zelaya abogamos porque se cumpliera el artículo 102 de la Constitución, que no se puede extrañar del país a ningún hondureño (solo narcotraficantes y otros del crimen organizado, según reformas recientes). Además, abogamos porque él regresara al país. Él ya está en Honduras, estamos en camino de hacer una especie de mediación nacional para que el país vuelva a la tranquilidad.
¿Por qué se fue Zelaya del Partido Liberal?
No lo sé. Su razón tendrá.
¿Es posible que el Papa lo autorice para hacer política?. Sí, porque es una ley eclesiástica. Es el canon 287, párrafo segundo, que dice que la autoridad competente puede autorizar una excepción al canon cuando está en juego la defensa de los derechos de la Iglesia y también el bien común. Aquí, en Honduras, los pobres han sido ignorados, hay dos millones y medio de indigentes, según las Naciones Unidas, y cinco millones de pobres. Francamente los ricos son un grupito muy pequeño y es necesario acortar la distancia. Aquí hay quienes ganan un millón de lempiras al día y otros que ganan tres mil lempiras al mes. Eso no es justo.
¿Por qué se hacen llamar Auténticos Liberales?
Auténticos porque no queremos ser liberales que haya robado el dinero de la República, no queremos ser liberales que han manoseado la Constitución o las leyes de la República a su favor. Queremos responder a las instancias de los estatutos del Partido Liberal, que fueron aprobados en la Convención de 2005 y que están muy bien hechos. Y esa doctrina social que está ahí es la que hay que practicar. En práctica hablamos de un liberalismo social y no de un socialismo de siglo XXI.
¿Qué tipo de gobierno pretende ejercer usted?
Es que una cosa es el gobierno en el aspecto político y otra lo que se va a hacer en una organización estructurada para el desarrollo de Honduras, que tiene que abarcar todos los aspectos de la actividad humana (la economía, el transporte, la educación, la salud).
¿La ideología de Zelaya la comparte usted?.
No conozco la ideología de Manuel Zelaya Rosales.
¿El socialismo del siglo XXI?
Para mí no hay ideologías. Para mí es la doctrina social de la Iglesia Católica la que pienso practicar en Honduras.
Hablando de la Iglesia, ¿usted apoya el aborto?
No, no, no. Absolutamente. La moral católica está en contra del aborto, incluso alabamos la actitud de aquellas madres que han preferido sufrir cualquier cosa con tal de no abortar su niño. Estoy totalmente en contra.
Y los grupos lésbicos, que están presionando por espacios y derechos, ¿está usted dispuesto a tomarlos en cuenta?
Mira. Ahí hay que distinguir dos campos: el campo individual subjetivo, que es que la mujer como el varón tienen derecho a que se respete su dignidad personal y su intimidad, cualquiera que sea.
Pero de eso, a querer establecer una norma general que eso ya es lo normal, no se puede porque lo que ha existido desde principios de la humanidad es la atracción física de un varón por una mujer y eso es lo que Dios dice en el libro del Génesis, que no hay que dogmatizarlo tampoco, pero sí es la palabra de Dios y tenemos que obedecer ese mandato de crecer y multiplicarse.
La Iglesia habla de perdón, ¿está usted dispuesto a perdonar a los golpistas que sacaron a Zelaya del poder el 28 de junio de 2009?
Es que ahí también hay que distinguir dos campos: el campo personal, que Jesucristo nos manda a perdonar cualquier ofensa porque dice ‘perdónalos como nosotros perdonamos a los que nos ofenden’, eso es en el campo personal; pero en el campo cívico, el que ha cometido un delito en contra de la Constitución tiene que tener su castigo por ese delito. Por eso los que dieron el golpe se apresuraron a aprobar ellos mismos una amnistía para declararse libres de toda responsabilidad, lo cual no es justo porque ellos violaron el orden constitucional y tienen que responder por ese delito que hicieron en contra de la Constitución de la República.
Y si esas personas que sacaron a Zelaya lo quieren acompañar en su lucha política ¿usted los aceptará?
Por supuesto que no.
¿A ninguno?
Ninguno.
¿Cree que le será fácil ganar las primarias de su partido?
Relativamente fácil. No lo veo tan difícil. La próxima semana tengo una reunión con José Eduardo Gaugel y con el doctor Edmundo Orellana Mercado. Ahí vamos a sacar un comunicado y vamos a cuestionar al actual Central Ejecutivo del Partido Liberal.
¿No descarta una alianza con Orellana y Gaugel?
Bueno, todos somos liberales.
Hay quienes dicen que usted, ganando los sellos del Partido Liberal, podría aliarse con el partido Libre, de Zelaya para disputar las elecciones generales. ¿Es cierto?
Están equivocados porque Libre ahora es un partido político. Ahora, si Libre abdica su decisión de formar un nuevo partido y se viene con los liberales auténticos, bienvenidos. Podemos ir juntos a las elecciones internas.
¿Es decir, crear una especie de alianza, pero sin ceder usted su candidatura presidencial?
Es que no puede haber alianzas. Podría haber una alianza con movimientos del mismo partido, pero ellos son otro partido. Entonces, cuando se funda un partido nuevo hay que ir a elecciones con los mismos deberes y derechos que los demás partidos.
