EI terreno que irregularmente apareció a nombre al exdirector del Instituto Nacional Agrario (INA), César Ham, fue devuelto sano y salvo.
Y, además, para responder a la pregunta de EL HERALDO de su edición de ayer, en el sentido de que cuándo devolverían la regalía los allegados de Ham que fueron beneficiados, dos de ellos regresaron los suyos mediante escritos formales presentados ante la Secretaría del INA.
A las 10:30 de la mañana llegó al ente agrario Pedro Velásquez, apoderado legal del exdirector del INA, a presentar un documento bajo el siguiente encabezado: “Se presenta formal renuncia a una adjudicación de terreno realizada por el INA, que deje sin valor ni efecto los títulos emitidos por dicho Instituto, así como su correspondiente inscripción en el Instituto de la Propiedad”.
Lo que dice el escrito
Luego del saludo respecto al recién nombrado director de la institución, Ramón Lara, el escrito señala: “César David Adolfo Ham Peña, mayor de edad, casado, del domicilio de la ciudad del (El) Progreso, Yoro, con muestras de mi acostumbrado comparezco ante usted a manifestar lo siguiente: Que en función de la noticia que apareció en algunos medios de comunicación, sobre la adjudicación de un lote de terreno a mi nombre en una propiedad del Instituto Nacional Agrario (INA), destinado a sus empleados y ubicado en Potrerillo, caserío El Espinal, aldea Yaguacire, del Distrito Central, deseo manifestarle que NO he solicitado al INA la adjudicación de ningún lote de terreno en el Distrito Central, ni en ninguna otra parte del país”.
“En tal sentido”, agrega Ham, “estoy interponiendo mi renuncia de carácter irrevocable sobre la adjudicación del lote en referencia a favor de mi persona. Y consecuentemente que el título emitido por dicha institución sea declarado nulo, para que no surta los efectos de inscripción en el Instituto de la Propiedad y contra terceros”. El escrito fue presentado ante Francisco Pérez, asistente de la Secretaría General del INA. Velásquez dijo que su cliente, César Ham, le dio instrucciones para que lo representara ante el INA. Informó que el exfuncionario está tranquilo, consciente que nada anormal ni ilegal ha hecho.
“Está haciendo una renuncia irrevocable sin afectar ni transgredir los derechos de los demás trabajadores. Cada quien va a tener la opción ya sea de impugnar, renunciar a un expediente administrativo que el director le abrió de oficio”, afirmó Velásquez. “él (Ham) está tranquilo, está en su derecho como todo ciudadano de agotar las instancias administrativas y judiciales”, añadió el apoderado de Ham.
Se suman primeros allegados
Velásquez igualmente presentó otro escrito bajo las mismas características en representación del exjefe del departamento Legal del INA, Marcos Ramiro Lobo, quien asimismo renuncia a su derecho porque nunca fue consultado. Dijo desconocer si otros exfuncionarios del INA, amigos de Ham, presentarán sus renuncias a los beneficios.
Otro allegado a Ham, Walter Manrique Juárez, exsecretario general, se presentó a la Secretaría General del INA a interponer su renuncia irrevocable a la posesión del terreno que, de manera inconsulta, según dijo, le transfirió el exdirector Nectaly Medina.
“La adjudicación del terreno nos causó extrañeza porque yo dejé de ser funcionario desde mayo del año pasado y actualmente no tengo ningún vínculo con la institución. Me tuve que trasladar desde mi domicilio en Catacamas para poner una renuncia irrevocable. En ningún momento utilicé el derecho de petición”, dijo Juárez.
“Estoy renunciando irrevocablemente a ese derecho para que no surta efectos legales contra terceros, para que no sea susceptible de inscripción y por ende sea nulo el título que se otorgó a mi favor”, agregó.
“Estamos contentos”
Luego de presentar los escritos en la Secretaría, el apoderado legal de Ham y el exsecretario general fueron recibidos por el director del INA, Ramón Lara, quien, por estar atendiendo este caso, no ha podido desarrollar la agenda de trabajo en la institución agraria.
Concluida la reunión privada, Lara mostró su satisfacción por la actitud de Ham y de dos de sus colaboradores.
“Vamos a hacer el trámite correspondiente para que en base a la renuncia se anule el título. Es un problema que se resolvió fácilmente. Estamos contentos por ello, a lo mejor vamos a ayudar a algún empleado que no ha sido beneficiado, pero lo importante es la voluntad que tuvieron estas personas de venir”, dijo Lara.
“Vamos a revisar la lista para ver si hay personas que no tienen ningún vínculo laboral con la institución y han sido beneficiados”. De encontrar irregularidades tanto en las adjudicaciones que hizo el Sindicato como las hechas por el INA serán anuladas, prometió Lara, exalcalde de Las Vegas, Santa Bárbara.
¿Y los otros?
Solamente Manrique Juárez y Marcos Ramiro Lobo, exfuncinarios del INA y amigos de Ham, renunciaron a sus derechos de adjudicación. Pero hay otros que también deben hacerlo, dijo el presidente de la Junta Directiva Central del Sitraina, Ramón Antonio Bulnes.
Citó a Sara Ruth Amador, secretaria general del INA; Mauricio Aguilar, exsubjefe de la División de Recursos Humanos; Vilma Erazo, jefa de la División de Recursos Humanos; Enma Guadalupe Mejía, jefa de la División de Reconversión Empresarial; Delmi Marlen Rodas, supervisora de personal, y Marco Tulio Rodríguez Peña, jefe de Transporte.
Los dirigentes del Sitraina, que tanto hablan de ética también deberían renunciar a sus derechos de posesión de “buenos lotes” y de esta forma dar el ejemplo, dijo un allegado a Ham. Confirmó que entre los dirigentes sindicales beneficiados con terrenos están Ramón Antonio Bulnes, Luisa Emilia Vallecillo, Javier Zúñiga Castellanos, Magda Regina Nolasco Corea, Manuel de Jesús Sosa, Ana Gabriela Meléndez, Fredy Maradiaga Godoy, Guillermo Bueso Laguna, Suyapa Maribel Ulloa, Edwin Jair Flores Flores, Doris Esmeralda Nolasco Corea y Olga Marina Vásquez Ortiz.
La denuncia y su origen
La denuncia del Sindicato, que fue publicada en exclusiva por EL HERALDO, además la base jurídica que posee, recuerda las pésimas relaciones que Ham tenía con la organización. Según Ham, el sindicato es cómplice de “actos de corrupción” de trabajadores que él no toleró y por eso cayó en desgracia con los dirigentes. Además, los trabajadores nunca aceptaron trasladarse al campo como parte de un proyecto de reingeniería impulsado por el propio Ham.
El terreno que devolvió Ham mide 1,792.83 varas cuadradas y está ubicado en Potrerillos, caserío El Espinal, aldea Yaguacire, bajo las características de “título gratuito”.
El predio es parte de un segundo lote de más de 90 manzanas que el INA le adjudicó al sindicato en el marco de las negociaciones del Noveno Contrato Colectivo. En 1998 el mismo INA le había adjudicado al Sitraina otras 129 manzanas para un primer grupo de trabajadores. El INA había comprado el terreno al Banco Nacional de Desarrollo Agrícola (Banadesa), que se quedó con él luego que su propietario no pudo pagar un préstamo por el cual había concedido el bien inmueble como garantía hipotecaria. El predio de topografía irregular está destinado a un proyecto habitacional.
El propósito de adjudicar esta segunda parte era para hacer justicia con el otro grupo de trabajadores (287 empleados) que no fueron beneficiados con la primera repartición masiva.
En una primera declaración, Ham había dicho que no poseía ningún terreno. “No soy dueño de ningún terreno, ni tampoco sabía (de la existencia) de un título de esa naturaleza. Yo no lo he solicitado, ni verbalmente, ni por escrito. Es más, ni sé dónde queda”, afirmó. Sin embargo, con la presentación del escrito donde renuncia a sus derechos está aceptando que es dueño de la propiedad. Por su parte, el exdirector Nectaly Medina declaró que fue un “error involuntario” suyo el haber incluido a Ham y a sus allegados.
Preparan retiro de documento del Instituto de la Propiedad
El Departamento Legal del Instituto Nacional Agrario (INA) prepara el documento que presentará al Instituto de la Propiedad (IP) en el que pedirá la suspensión del trámite de inscripción de los títulos de propiedad adjudicados al exdirector César Ham y a dos de sus excolaboradores.
Los títulos de propiedad de Ham, el de Marcos Ramiro Lobo y el de Manrique Juárez, estos últimos exjefe del Departamento Jurídico y Secretario General, respectivamente, serán retirados del IP para posteriormente anularlos. Los exfuncionarios renunciaron formalmente a su derecho de posesión de la propiedad porque nunca la solicitaron y no fueron consultados, según explicaron en sus escritos presentados a la Secretaría General del INA. “Vamos a blindar esos terrenos en favor del Instituto”, afirmó el director del INA, Ramón Lara.
El funcionario, que apenas tiene cinco días de haber tomado posesión de su cargo, espera que otros allegados a Ham hagan lo mismo, renunciando a sus derechos. También hará una investigación del resto de títulos.