El sistema socialista del gobierno venezolano no debe ser enterrado, sino transformado para darle mayores beneficios a la sociedad de esa nación sudamericana.
Esa es la postura que el candidato presidencial opositor por el partido Primero Justicia, Henrique Capriles, tiene frente al modelo de gobierno que ha impulsado el mandatario y contendor en las elecciones presidenciales Hugo Chávez, aspirante por el Partido Socialista Unido de Venezuela.
“Nosotros hemos propuesto darle rango legal a las misiones (programas sociales), porque el problema es que hoy funcionan como una herramienta de chantaje y de presión del gobierno”, dijo el aspirante que, según las encuestas, se encuentra entre 5 y 10 por ciento por debajo de Chávez en los sondeos sobre intención de voto. El plan de gobierno de la oposición se basa en propuestas de solución a las principales debilidades o carencias que no han sido atendidas por el gobierno, aseguró.
Capriles dio una entrevista a EL HERALDO, medio que cubre este proceso electoral, sobre sus expectativas en las votaciones y algunos elementos de su proyecto de gobierno.
Entre las consultas respondidas, Capriles habla sobre la posibilidad de reanudar relaciones diplomáticas plenas con Honduras, las que se rompieron luego del derrocamiento del expresidente Manuel Zelaya en junio de 2009.
¿Piensa reanudar relaciones diplomáticas con Honduras si gana las elecciones presidenciales? Nosotros vamos a mantener relaciones cordiales y de respeto con todos los países, tomando en cuenta que las relaciones son entre Estados y no entre gobernantes, siempre atentos al beneficio de nuestro pueblo y sin que esas relaciones signifiquen un descuento de la factura petrolera.
¿Por qué Chávez no debe continuar en el poder? Porque no le cumplió al país, su gobierno llegó con un objetivo y en el camino se desviaron. Pusieron sus intereses y sus ansias de poder por encima de los venezolanos y se dedicaron a promover un proyecto político en lugar de construir el país, se dedicaron a ayudar a otros países en lugar de atender las necesidades de los venezolanos y el pueblo se ha dado cuenta de eso.
Los venezolanos saben que no pueden darle seis años más a un gobierno que en 14 años no pudo con la inseguridad, el desempleo y la escasez. Al candidato del gobierno solo le interesa promover la paz planetaria, pero alrededor de 50 personas pierden la vida diariamente como consecuencia de la inseguridad desbordada. El candidato del gobierno propone salvar a la especie humana, pero no tenemos quien salve a los venezolanos.
Los intereses de este gobierno no son los mismos intereses de nuestro pueblo. Necesitamos un gobierno comprometido con darle solución a los problemas de los venezolanos, especialmente los más necesitados, y ese compromiso lo asumimos nosotros con toda la responsabilidad que merece.
¿Desaparecerá el sistema socialista implantado por el gobierno actual, y por qué? Los programas sociales que traigan beneficios reales a nuestro pueblo se fortalecerán, pero nuestra Venezuela necesita un gobierno progresista que se ocupe de desarrollar las capacidades de la gente para que puedan superarse.
Demostraremos a los venezolanos que hay una forma distinta de hacer las cosas, que no se necesita formar parte de un partido político para obtener ayuda del gobierno y que no necesitan aportar un día de salario para ningún partido.
Nosotros tenemos un plan para darle solución a cada uno de los problemas de los venezolanos. Tenemos un plan de empleo para crear tres millones de nuevos empleos durante los próximos seis años; tenemos un plan para darle seguridad a nuestra gente y para eso destruiremos las armas ilegales y formaremos a 20 mil nuevos funcionarios; dotaremos los centros de salud, mejoraremos la infraestructura escolar, construiremos las viviendas necesarias y generaremos las condiciones para que aumente el poder adquisitivo de los venezolanos.
A partir del 10 de enero tendremos un gobierno comprometido con las soluciones de nuestro pueblo. Juntos vamos a construir esa Venezuela de progreso que llevamos tanto tiempo esperando.
¿Qué pasará con las misiones o programas de asistencia social que desarrolla el gobierno en caso de ganar las votaciones? Nosotros hemos propuesto darle rango legal a las misiones, porque el problema es que hoy funcionan como una herramienta de chantaje y de presión del gobierno hacia nuestro pueblo. Pero los programas sociales son conquistas de nuestro pueblo y nadie se las puede quitar, por eso proponemos la ley.
Por supuesto, las misiones tenemos que mejorarlas, vamos a mejorar lo que sea necesario, para que las misiones se conviertan en un paso previo al progreso de los venezolanos y no un fin único. Tenemos que desarrollar las capacidades de nuestro pueblo para que puedan progresar.
¿Cree que los gobiernos de países adheridos a la Alba acepten un triunfo suyo, y cómo los convencería? Los gobiernos los eligen los pueblos, y siempre que sean electos democráticamente deben ser aceptados y respetados. Ya nos tocará encontrarnos en las instancias de integración a las cuales pertenecemos y siempre mantendremos una relación de respeto.
¿Cuáles son sus debilidades como candidato? Mi única debilidad es tener el corazón tan grande que caben todas las venezolanas.
¿Cuál es la diferencia entre usted y Chávez? Nosotros representamos una candidatura de carne y hueso, que escucha a los venezolanos y atiende sus inquietudes, representamos la esperanza de un futuro de progreso. El otro candidato es el candidato del afiche, la pantalla y la cháchara.
Nosotros estamos haciendo una campaña histórica. Lideramos una candidatura que camina hombro a hombro con los venezolanos, conociendo sus problemas y ayudándolos a construir soluciones. Recorrimos alrededor de 300 pueblos, visitando casa por casa a los venezolanos, recorriendo pueblo por pueblo cada rincón del país. Hemos llegado a pueblos a los que nunca ha ido el gobierno o alguna autoridad. Queremos que nuestro pueblo confíe y conozca que hay otra manera de hacer las cosas.
¿Cuál es la base de su plan de gobierno? Hemos presentado un programa de gobierno bien pensado, diseñado por un gran equipo de profesionales en cada área y tomando en cuenta todos los problemas y carencias que en cada uno de los recorridos plantearon los venezolanos. Allí planteamos el acceso a una educación de calidad, garantizamos atención en materia de salud para todos por igual, generación de muchos empleos con calidad, exportación de productos con el sello “Hecho en Venezuela”, y que los venezolanos puedan salir a la calle sin miedo a ser víctimas de la violencia. Utilizaremos el petróleo como la palanca para el progreso de nuestra Venezuela.
¿Cómo define el modelo socialista? El socialismo, entendido como la propiedad de los medios de producción por parte del Estado, demostró su incompatibilidad con el bienestar y el progreso de nuestro pueblo. Pero el socialismo moderno que vemos en muchos países europeos, o sin ir muy lejos, en Brasil, es otra cosa. Busca un equilibrio entre la libertad y la justicia, algo muy pertinente en países con tantas desigualdades e injusticias sociales como el nuestro.
¿En qué basa usted sus esperanzas de triunfo? Lo vemos en las calles de cada rincón de nuestra Venezuela al que vamos. Cada vez son miles y miles los venezolanos que se montan en el autobús del progreso. Nuestro pueblo se cansó de un gobierno que no da solución a sus problemas y que se la pasa todo el día de cháchara. La energía que sentimos en cada recorrido ahora nos toca convertirla en millones de votos el 7-O (7 de octubre).