La emergencia aún no ha pasado. Así califican las autoridades locales la situación que se vive en el municipio de La Libertad, tras las lluvias del pasado viernes.
Y es que aún cuentan con varias comunidades incomunicadas a causa del cierre de las carreteras como consecuencia de los derrumbes y deslizamientos presentados en la zona.
Según Héctor Redondo, miembro del Comité de Emergencia Municipal (Codem), hasta la mañana de ayer unas 22 comunidades de la parte alta del municipio seguían a la espera de ayuda para habilitar los accesos vehiculares.
“La información proviene de los Comités de Emergencia Local de cada comunidad y nos ha dicho que los problemas que tiene son los derrumbes que obstaculizan el paso para poder llevar comida y mercadería”, dijo Redondo.
El único acceso que se ha logrado hasta el momento fue el paso hacia la comunidad La Pita, ubicada a unos cinco kilómetros del casco urbano.
Las comunidades como Laureles, Esperanza, Goteras, El Filo, Faldón, Derramadera, Santa Fe, Los Alfaros, Cuesta del Neo, Zacatalito, La Soledad, el Higuerón, Loma Alta, La Mina, La Laguna, Cantón y San Antonio siguen incomunicadas.
También La Laguna del Rincón, Buena Vista, Cerro Negro y El Olvido, las cuales son consideradas como las más retiradas.
Unas 5,000 personas son las que residen en estas zonas.
Las necesidades que más se reportan son alimentos, ropa y víveres.
De acuerdo con el funcionario, estas aldeas y caseríos además carecen de agua potable debido que los conductos del agua potable colapsaron.
Para habilitar el agua en el casco urbano se necesitan 145 lances de tubo PVC de presión, según el reporte de las autoridades municipales.
Entrega de alimentos
Los miembros de la Cruz Roja y el Comité Permanente de Contingente (Copeco) comenzaron a llevar víveres desde el lunes, aunque aún hace falta más raciones.
Copeco entregó raciones para 100 familias afectadas, cada una de las bolsas contenía alimentos, ropa para adultos y niños, kits para bebes, frazadas y colchonetas.
También se instaló una planta potabilizadora de agua, la cual generará 280 galones por hora y una cisterna de almacenamiento de agua con capacidad para 500 galones y un tanque cisterna de agua con capacidad para transportar 1,500 galones y de esta manera facilitar la entrega del vital líquido.
Las autoridades del Batallón de Ingenieros y personal del Fondo Hondureño de Inversión Social (FHIS) también apoyaron con maquinaria para habilitar el paso en La Lomita, donde habían quedado incomunicados los vecinos de San Luis, Lajas y Esquías.
El ministro del FHIS, Edgardo Martínez, declaró que los trabajos hechos hasta el momento son de mitigación para evitar otra catástrofe a corto plazo, pero se debe hacer un plan de acción más eficaz.
“Hemos dragado los tres ríos que afectaron la comunidad, se ha levantado una borda para que el agua no se meta a las casas, pero se necesita construir gaviones entre otras obras que den mayor protección”, confesó el funcionario.
Alerta
La alerta verde, declarada por Copeco desde el domingo, se mantiene para los departamentos de Colón, Yoro, Atlántida, Cortés, Gracias a Dios, Comayagua y Francisco Morazán.
La medida seguirá en vista de la inestabilidad provocada por la presencia en el Atlántico de la tormenta tropical Sandy.
El fenómeno, según Copeco, se encuentra a 614 kilómetros al este del cabo de Gracias a Dios, entre los 14.3 grados norte y 77.6 oeste, con una velocidad de nueve kilómetros por hora.