Tegucigalpa, Honduras
La Junta de Convocantes creada para propiciar un diálogo nacional no está cruzada de brazos y ante el decaimiento de este proceso se ha propuesto reanudar una ronda de reuniones con los actores políticos a fin de convencerles para que vuelvan a las mesas técnicas en las Naciones Unidas.
Pero el éxito de este esfuerzo estará estrechamente vinculado a la voluntad que puedan tener los principales protagonistas de la crisis política: el presidente Juan Orlando Hernández, el exgobernante Manuel Zelaya Rosales, el excandidato presidencial del Partido Liberal, Luis Zelaya y el presidente del Partido Innovación y Unidad (Pinu), Guillermo Valle.
La voluntad de estos actores será clave para la reactivación de las conversaciones, pero también la sociedad civil debe jugar su propio rol, en opinión de Efraín Díaz Arrivillaga, miembro de la Junta de Convocantes.
De su lado, Jorge Yllescas, quien también forma parte de este grupo de ciudadanos, destacó que ellos han venido “trabajando intensamente en la promoción del diálogo, ha habido un bajón, pero nosotros no estamos en receso.
Nos hemos reunido con la Conferencia Episcopal, con los dialogantes, con las Naciones Unidas y seguimos trabajando”, dijo.
“No es fácil, pero yo tengo la esperanza de que los partidos van a regresar a las mesas de negociación”, añadió Yllescas.
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Preguntado sobre la posición del expresidente Zelaya respecto a este tema del diálogo, Yllescas dijo que el único que ha sido claro en sus posiciones públicas ha sido justamente Zelaya, él no quiere diálogo donde estén los representantes del gobierno.
Zelaya “quiere un mediador, quiere un juez, un árbitro que diga quién ganó (las elecciones), pero ‘Mel’ es un político tradicional, con una escuela tradicional de 40 años, entonces lo que busca es negociar directamente intereses personales”.
El representante de las Naciones Unidas, Igor Garafulic, pidió reanudar el prediálogo “porque los problemas no se arreglan solos”.
En algún momento el diálogo se va a retomar.
