NUEVA YORK, ESTADOS UNIDOS.- Durante la audiencia de sentencia, Mauricio Hernández Pineda manifestó que ha sido víctima de abusos durante su estancia en prisión por parte de altos funcionarios del gobierno de Estados Unidos.
Según denunció, el hondureño declarado culpable por el tráfico de droga, que ha sido blanco de ataques, además que lo pusieron al lado de pandillas y ha presenciado el asesinato de dos colegas.
“He sido blanco de ataques de altos funcionarios de este gobierno. Me metieron en el hoyo durante 271 días. Me han puesto con pandillas. He visto gente quemada con agua caliente; He visto a dos colegas asesinados brutalmente”, manifestó en la audiencia frente al juez Kevin Castel.
Afirmó que Estados Unidos ha sido un país que se caracteriza por proteger los derechos humanos, pero que en su caso no ha visto ninguno.
“Este país promueve los derechos humanos, pero yo no lo he visto en mi caso. Me siento impotente. Cuando esté libre, quiero iniciar una granja aviaria para producir huevos en mi país”, sostuvo Hernández Pineda ante el juez previo a conocer su sentencia.
Al escuchar la queja de Hernández Pineda sobre los tratos en prisión que estaba recibiendo en la cárcel, el togado rechazó “cualquier mala fe en su aislamiento”.
El juez Kevin Castel condenó a Mauricio Pineda a 180 meses (15 años) de cárcel y luego deportado hacia Honduras.
Se declaró culpable
Tras declararse culpable, el pasado febrero, de tres delitos relacionados con el narcotráfico, Mauricio Hernández, aseguró en una carta enviada al juez Kevin Castel que estaba arrepentido por lo que había hecho y que era un hombre nuevo.
Hernández Pineda aseguró estar ayudando a otros presos a hablar español y que uno de sus objetivos al retornar a Honduras será tener una granja.
El ex miembro de la Policía Nacional fue señalado 4 de septiembre de 2019 por Estados Unidos por los delitos de conspirar para importar cocaína, usar y transportar ametralladoras y dispositivos destructivos, conspirar para usar y transportar ametralladoras y dispositivos destructivos, por lo que cinco meses después se entregó a las autoridades para evitar una extradición.
Las investigaciones de la Fiscalía revelan que Mauricio Hernández Pineda fue un socio estratégico de “Tony” Hernández y hasta el narcotraficante Alexander Ardón reveló que Hernández Pineda se encargaba de custodiar los cargamentos de cocaína.
Mauricio Hernández Pineda fue un miembro de alto rango de la Policía Nacional de Honduras hasta su depuración el 23 de agosto de 2018.
Según el Departamento de Justicia de Estados Unidos, es primo de Juan Orlando Hernández y Antonio “Tony” Hernández (ambos sentenciados por narcotráfico), aunque esto ha sido negado por Melvin Bonilla, el ex apoderado legal de “Tony” Hernández.