TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Desde la captura del expresidente Juan Orlando Hernández, luego de la petición de extradición por parte de Estados Unidos, su esposa, Ana García, se ha mantenido al frente de la situación exigiendo justicia y respeto para su amado.
García se ha presentado a las diferentes organizaciones de respeto a los Derechos Humanos por el trato “horroroso” que recibió el exmandatario al ser “exhibido” con grilletes ante los medios de comunicación. Además de realizarse un examen médico frente a las cámaras.
Tras las denuncias interpuestas, la ex primera dama ha escrito varios mensajes bíblicos en su cuenta de Twitter que se refieren a su inocencia ante los señalamientos.
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“Bendito sea Dios, que no ha desechado mi oración, ni apartado de mi su misericordia” (Salmo 66:20) fue el primer mensaje que publicó junto a fotografías de ella y su esposo.
En otro escribió: “Me invocará, y le responderé; yo estaré con él en la angustia; lo rescataré y lo honraré; lo saciaré de larga vida y le haré ver mi salvación”, (Salmo 91:15-16).
“Gracias a todos los que día a día nos envían su solidaridad y sus oraciones ¡Dios es nuestra fortaleza!”, publicó junto a una fotografía de ellos tomados de las manos en la toma de posesión de 2018.
Otro mensaje que publicó: “Mi Dios envió su ángel, que cerró la boca de los leones, y no me han hecho daño alguno porque fui hallado inocente ante él; y tampoco ante ti, oh rey, he cometido crimen alguno”, (Daniel 6:22).
El último post tomado del Evangelio de San Lucas fue: “Pues no hay nada oculto que no haya sde ser manifiesto, ni secreto que no haya de ser conocido y salga a la luz”.
Tanto la ex primera dama como Hernández han denunciado que los señalamientos de su supuesta conspiración en el tráfico de droga hacia Estados Unidos es una venganza de los narcotraficantes que fueron extraditados durante su gestión.
García aseguró que la verdad va a salir a la luz, “Juan Orlando está siendo objeto de una venganza de los narcos que fueron extraditados”.
