TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La oposición a la Ley de Educación Integral para prevenir embarazos adolescentes se hizo sentir el pasado fin de semana durante la multitudinaria movilización que protagonizaron padres de familia, las Iglesias Católica y Evangélica y otros sectores en seis ciudades del país.
Los padres esperan que la ley no sea sancionada por la presidenta Xiomara Castro.
“Esperamos que la Presidenta vete la ley que es lo que se pidió en la marcha”, dijo Cecile Flores, representante del movimiento “Por nuestros hijos”.
Nueva iniciativa
Desde el movimiento se trabaja en una iniciativa de ley sobre educación sexual con enfoque en la familia, la cual pretenden llevar al Congreso Nacional.
La iniciativa establece además derechos parentales, con el propósito de que se involucre a los padres en las decisiones o cambios que se hagan en temas educativos, explicó la madre de familia.
“La idea de esa iniciativa es que todo lo que tenga que ver con la educación de nuestros hijos participemos nosotros”, dijo.
A pesar del rotundo rechazo a la normativa, presentada por la diputada Shirley Arriaga y que fue aprobada en el Legislativo el 8 de marzo, las autoridades de la Secretaría de Educación dejaron firme su decisión de seguir avanzando con el diseño y construcción del reglamento que regirá la normativa.
“Nosotros hemos dejado muy clara nuestra posición y vamos a seguir avanzando en esa dirección”, dijo el ministro de Educación, Daniel Sponda.
Se esperaba que la semana pasada se retomara la reunión para realizar el reglamento, pero fueron suspendidas sin dar una razón.
El ministro de la Presidencia, Rodolfo Pastor, indicó a EL HERALDO que el Ejecutivo dejará que Educación decida en el tema.
