TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El Secretario de Seguridad, Ramón Sabillón, aclaró este miércoles que ni agentes de la Administración de Control de Drogas (DEA), ni de la agencia del Departamento de Justicia de EEUU, están a cargo del resguardo del expresidente Juan Orlando Hernández, pedido en extradición por Estados Unidos.
Afirmó que es la Policía Nacional la que tiene la responsabilidad de guardar la integridad física del exgobernante, para que se desarrolle a cabalidad el proceso que se le sigue por los tres delitos de narcotráfico que le imputa Estados Unidos. Por lo tanto, “hay una unidad especial lista para dar respuesta ante cualquier pista que indique que alguien quiera atentar contra la integridad física del expresidente”, detalló el comisionado en condición de retiro.
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Aunque la DEA ya no participa en el resguardo del exgobernante, las autoridades hondureñas mantiene comunicación con el Departamento de Justicia en caso de tener que repeler un ataque que ponga en peligro la vida del expresidente hondureño.
“Resguardarlo es una tarea que nos corresponde en un 100 por ciento, pero se mantiene coordinaciones por cualquier evento y la DEA colabora con nosotros”, afirmó Sabillón en declaraciones a Radio América.
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“Estos casos son complejos por la consonancia de las acusaciones que se le hacen, tenemos que salvaguardar su integridad física para que se consuma el proceso que se está llevando a cabo”, puntualizó.
Este miércoles el funcionario se reunió además con el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Rolando Argueta, para conocer de primera mano los detalles de las nuevas cuatro solicitudes de extradición que Estados Unidos envió este día.
La siguiente audiencia del expresidente Hernández quedó pactada para el próximo 16 de marzo de 2022, a las 9:00 de la mañana.
Y es en esa misma audiencia en donde el juez Ortez decidirá si la extradición es admisible o no, pero en este punto pueden ocurrir dos cosas:
1. La primera es que la extradición sea admitida, pero la defensa del expresidente presente un recurso de apelación, por lo que la Corte Suprema de Justicia deberá someter a discusión este recurso y decidir si procede o no.
Si se admite la apelación, la solicitud de extradición será denegada y el acusado, en este caso, el expresidente Juan Orlando Hernández, sería puesto en libertad de forma inmediata.