A través de una solicitud de información pública, EL HERALDO pidió copia de los contratos firmados con las farmacéuticas de Pfizer y el Instituto de Gamaleya (para la Sputnik V), pero el IAIP contestó que “por el momento no se dará la documentación solicitada, ya que se encuentra en proceso de reserva en el IAIP”.
Ante la negativa, este rotativo pidió una copia de la solicitud que hizo Salud por cada compra para que se declarara así, pero nuevamente afirmaron se trataba de información bajo reserva.
En la resolución 154-2021-CI sobre la compra de las 4.2 millones dosis de Sputnik V, el IAIP menciona que fue la misma ministra de Salud, Alba Consuelo Flores, quien hizo la petición el pasado 23 de marzo de 2021, para que se declarara reserva de información a “las cláusulas 4. Propiedad intelectual, numerales 4.1 y 4.2 y cláusula 11. Reglas para enviar mensajes y documentos, numeral 11.2, relacionado a los datos bancarios del vendedor y datos bancarios del comprador”.
Asimismo, lo que concierne a los suministros, los términos y condiciones de las especificaciones y la propiedad intelectual. Es decir, la información relacionada con el costo, distribución y forma de envío de las dosis de Sputnik V que Honduras compró a Rusia.
En ese entonces, el IAIP recomendó a Salud realizar una versión pública del contrato, donde se menciona que la Empresa de Responsabilidad Limitada Vacuna Humana (en Español) es la proveedora de las dosis de Sputnik V, que fabrica el Instituto de Gamaleya.
¿Y las vacunas compradas a Pfizer?
EL HERALDO pidió información referente al precio de las 8.6 millones de dosis, de las cuales solo se han recibido 46 mil de Sputnik V y 155,610 de Pfizer, pero el IAIP declaró bajo reserva todo lo relacionado a las 4.4 millones de dosis de Pfizer.“Por los momentos no se facilitará copia ya que se encuentra en Solicitud de Reserva en el IAIP, bajo expediente No. 004-2021-CI”, contestó el IAIP en una solicitud de información pública.
Honduras desconoce completamente cuánto costó cada vacuna adquirida a través de Pfizer o los plazos acordados para el envío. Hasta la fecha ha recibido tres entregas: la primera de 59,670, la segunda de 54,990 y la última de 40,950 dosis.
En entrevistas anteriores las autoridades de Salud apenas dijeron que se trataba de un acuerdo confidencial, porque así lo pidió el proveedor, pero se olvidó del principio máxima publicidad (toda la información en posesión de los sujetos obligados es pública, completa, oportuna y accesible).
A excepción de Honduras, varios países han publicado el costo de la vacuna adquirida con la farmacéutica, pero no se trata de un precio estándar sino que depende de la región.
En diciembre de 2020 Bélgica compartió parte del acuerdo y reveló que pagó 14.6 dólares por cada vacuna. Medios africanos también dijeron que en Túnez el costo fue de siete dólares, mientras que Israel negoció cada dosis a 23.02 dólares. En la Unión Europea el precio fue casi la mitad de lo de Israel, pues pagaron 14.17 dólares por inmunizante.
Contrato de la Sputnik V
EL HERALDO tuvo acceso al documento que constata que el costo de cada vacuna es de 9.95 dólares (241 lempiras al cambio de dólar en ese momento), es decir que, en los 4.2 millones Honduras pagó el equivalente a 41.7 millones de dólares, más regalías.La compra es por 2,115,000 tratamientos del componente uno y la misma cantidad del componente dos, es decir que, Honduras está obligada a comprar 4,230,000 dosis, ya que si no pide la cantidad negociada está obligada a pagar el 100% del importe total.
El 50% del pago debe ser cancelado antes del envío y el otro 50% se realizará mediante transferencia electrónica dentro de los cinco días hábiles después de recibir los productos.
“Las partes acordaron que todos los gastos que puedan surgir durante la transferencia de fondos monetarios a la cuenta bancaria del vendedor son asumidos por el comprador”, especifica el inciso 2.8 de los términos y condiciones de las especificaciones.
El contrato fue muy premeditado, ya que incido 2.4 facilita completa libertad al vendedor para entregar los productos. “El vendedor tiene derecho a entregar el componente I y componente II del producto por separado”, reza el mismo inciso.
Además, detalla que no se hace responsable de ningún retraso en el suministro de las vacunas si se debe a la interrupción o falta de producción, lo que explica por qué la Secretaría de Salud no sabe cuándo llegará el componente dos de las 40 mil dosis que se recibió en mayo pasado.
Ver el el contrato de compra de 4.2 millones de dosis de Sputnik V