TEGUCIGALPA, HONDURAS.-La corrupción pública es considerada un mal endémico en Latinoamérica y en general en gran parte del mundo, sin embargo, en algunos países centroamericanos se han reportado los más altos índices en las últimas décadas.
De esta problemática dialogamos con el presidente de la Corte de Cuentas de la República de El Salvador, Roberto Antonio Anzora Quiroz, quien explicó cómo este país vecino está combatiendo la corrupción desde que Nayib Bukele asumió la primer magistratura.
¿Cómo han logrado mejorar los procesos de contraloría y el combate de la corrupción en la gestión pública en El Salvador?
A nivel regional compartimos una visión de trabajar en el combate a la corrupción, detectándola y previniéndola. Nosotros le estamos haciendo un abordaje a través del uso de la tecnología y el fomento de las capacidades de nuestro talento humano; lo que necesitamos es tener instituciones más técnicas, más profesionales, que tengan la capacidad de identificar oportunidades de mejora para potenciar la función pública, de detectar actos de corrupción, siendo menos sancionador y enfocarnos más en prevenir.
¿Qué problemas similares se viven en la institucionalidad salvadoreña con relación a Honduras?
El problema de la corrupción es un problema generalizado, es endémico. Hay mal uso de los recursos públicos, es una situación de patrones de comportamiento que compartimos en la región y quizás a nivel mundial, unos a mayor escala que otros que han logrado contener y minimizar los riesgos de corrupción. La corrupción hay que combatirla adentro de la casa y hacia afuera; aquellos malos elementos que se presten a conductas ilegales hay que separarlos de las instituciones.
¿Qué ha cambiado con relación al gobierno de Salvador Sánchez Cerén en el combate a la corrupción?
Hay una posición sumamente contundente del presidente Bukele de declarar una guerra contra la corrupción. En ese sentido, el presidente está apoyando a todas las instituciones que trabajamos sistemáticamente en el combate a la corrupción y un apoyo decidido de la Asamblea Legislativa; eso ha fomentado el trabajo interinstitucional en el que compartimos investigaciones para hacerlo más efectivo.
¿Atribuye al trabajo conjunto el hecho de que también haya mejorado en la seguridad ciudadana?
Por supuesto que sí. Es uno de los logros que hay que reconocerle al presidente Bukele, la valentía que ha tenido para combatir la criminalidad organizada, de combatir a estos grupos terroristas denominados maras, que tenían secuestrada a la población salvadoreña, la población ha sido liberada de ese problema.
¿Qué podría hacer Honduras para tener un efectivo ataque contra la corrupción pública?
Creo que Honduras va por un buen camino y creo que debe de enfocarse en llevar algunas medidas que podrían ser más fuertes, que al final son definitivas para que se combata la corrupción y la criminalidad, para que la población tenga una mejor calidad de vida.