Tegucigalpa, Honduras
La Secretaría de Seguridad separó por seis meses a 25 elementos de la Unidad de investigaciones Sensitivas (SIU) por estar vinculados al hurto de 1.3 millones de dólares (28 millones de lempiras) del botín de la banda de supuestos narcotraficantes de los Valle Valle.
Entre los efectivos sancionados se encuentran 20 de la Tropa de Investigación y Grupo de Respuesta Especial de Seguridad (Tigres) y el resto pertenece a otros dos organismos policiales, dijo una fuente de la Policía Nacional.
“La próxima semana se piensa hacer más separaciones y así dependiendo de los resultados de las investigaciones”, dijo la fuente a EL HERALDO.
Los efectivos del grupo TIGRES separados llegaron entre jueves y viernes a la sede de esa unidad en Lepaterique, Francisco Morazán, a traer su notificación de suspensión y a entregar sus uniformes, placa, arma de reglamento y demás artículos de uso oficial.
No obstante, la fuente explicó que si en el transcurso de las indagaciones se determina que estos separados están libre de culpa podrán volver a la entidad antes de que termine el plazo de seis meses.
“Este proceso va a continuar, pero creemos que a más tardar en enero del próximo año todo quedará claro y estarán señalados todos los involucrados”, explicó la fuente.
La denuncia
EL HERALDO reveló esta semana que 22 elementos TIGRES hurtaron 1.3 millones de dólares, de los 12.5 millones encontrados en 19 sacos que estaban en un barril enterrado, luego de haber dado captura a Miguel Arnulfo y Miguel Alonso Valle Valle en un sector de Copán, fronterizo con Guatemala, el 5 de octubre pasado.
Se maneja que elementos de la recién creada unidad élite llegaban a las pulperías a comprar un refresco u otro producto con dólares y hasta le regalaban algún billete de 100 a sus amigos.
Precisamente fue el gasto desmesurado de los policías de TIGRES que tomaron esos dólares lo que los puso en evidencia e hizo que la inteligencia policial comenzara a investigar por qué los agentes que habían participado en la captura de dos hermanos de la banda de narcotraficantes y en el hallazgo del botín comenzaron a darse una vida de lujos en un lapso de menos de dos meses.
Las pesquisas apuntan a que el dinero también fue utilizado por otros elementos para la compra de una casa, una carro deportivo y pagar servicios sexuales de prostitutas.
Existe otra serie de compras que hizo este puñado de policías corruptos que no ha sido precisado para no afectar las investigaciones.
Metieron las garras
Cuando fueron capturados los dos hermanos Valle Valle por efectivos de TIGRES, en El Espíritu, Copán, estos policías encontraron cerca de ese lugar un barril enterrado que en su interior tenía 19 sacos.
Los elementos TIGRES alertaron del hallazgo a efectivos de otras dos unidades, que tardaron unos 10 minutos en llegar al sitio.
Pero antes de que los agentes de las otras dos agencias llegaran, los policías TIGRES se percataron de que en los bolsos había dólares, por lo que decidieron esconder dos en un matorral y solo reportaron 17.
Las sospechas recaen, inicialmente, sobre 22 de los 50 policías de TIGRES que participaron en el operativo de captura de los Valle Valle.
Existe la hipótesis de que el dinero fue llevado en una patrulla hacia un hotel en las afueras de San Pedro Sula, donde se hospedó el contingente.
Una fuente confió a EL HERALDO que la repartición del dinero se hizo durante la noche del 5 de octubre en una de las cabañas asignadas a dos comisarios que dirigieron el operativo de arresto.
Fueron estos dos los que, según las investigaciones, autorizaron a sus subalternos para sustraer los dólares.
Los dos comisarios llamaron a dos subinspectores para que llegaran a su habitación con el fin de contar el dinero.
Cuando los dólares estaban contabilizados, se decidió llamar a la habitación a otros tres subinspectores y un cuarto oficial, del que no se precisó el nombre, para analizar las cantidades que se iban a repartir entre los 22.
Posteriormente se convocaron a los restantes 14 efectivos de TIGRES de escala básica para que, uno por uno, llegaran a la habitación, donde los esperaban los ocho oficiales, y darles diferentes cantidades del dinero mal habido.
Entre los ocho oficiales se distribuyeron un millón de dólares y los restantes 300 mil dólares se dividieron entre los otros 14 elementos de escala básica, según las fuentes.
La Policía Nacional sometió a prueba del polígrafo a 12 policías de TIGRES investigados para sacarles la verdad sobre el hurto, de los que 8 resultaron aplazados y otros 4 decidieron confesar que habían tomado el dinero porque “no aguantaron la presión” de las interrogantes, dijo la fuente.
Las confesiones de los cuatro elementos de TIGRES las dejaron plasmadas mediante un manuscrito al que les colocaron sus firmas y huellas dactilares y que servirá como una de las pruebas para presentar requerimientos fiscales en contra de los involucrados.