Tegucigalpa, Honduras
Nohemy Gonzáles llegó puntual, a las 6:00 de la mañana, al Hospital Escuela Universitario (HEU) a la cita médica que tenía programada para este viernes.
La señora, de 59 años de edad, iba a ser evaluada de la tiroides porque dentro de dos meses será intervenida quirúrgicamente por segunda ocasión.
Ella desconocía las tirantes negociaciones que han tenido médicos y gobierno por un incremento salarial que piden los primeros y por eso se vino hasta la capital procedente de Roatán, Islas de la Bahía.
Ella esperó toda la mañana para ser atendida. Sin embargo, su larga espera no rindió frutos porque las atenciones en el área de consulta externa están suspendidas hasta nuevo aviso. La angustiada mujer tuvo que emprender su largo y complicado viaje de regreso hasta la isla.
“Yo estoy de acuerdo con que los doctores tengan sus peticiones, pero los pacientes no tenemos culpa de lo que está pasando”, lamentó con una gran dificultad para hablar debido a su problema en la tiroides.
Así como ella, cientos de pacientes se quedaron sin atención médica en los hospitales públicos del país por tercer día consecutivo.
No obstante, las emergencias y las cirugías programadas no se han descuidado.
Otros hospitales
Esa misma situación se vivió en el Hospital San Felipe, el Instituto Nacional Cardiopulmonar, mejor conocido como Tórax, y hasta el Hospital María de Especialidades Pediátricas.
De igual forma los hospitales públicos del interior del territorio nacional.
Este viernes se sumaron a las asambleas alrededor de 2,100 estudiantes de medicina que están en servicio social y los médicos que estudian una especialidad y se les conoce como residentes.
Deuda acumulada
El conflicto entre los profesionales de la medicina con el gobierno, en lugar de llegar a una solución, se estanca cada vez más. Los médicos exigen el pago de una deuda acumulada que tiene el gobierno con ellos desde hace cuatro años y oscila los 300 millones de lempiras.
Según el gremio médico, su petición de aumento salarial de un 23% está sustentada en la ley y, además, debido a que no se les incrementa desde 2013.
La Ley de Reordenamiento del Sistema Retributivo del Gobierno Central establece que los médicos recibirán un ajuste según la tasa de inflación que es definida por el Banco Central de Honduras (BCH).
Las autoridades del gobierno mantienen que no existe la capacidad económica para pagar lo que los galenos demandan.
El pasado martes, en una reunión entre las partes en conflicto, las autoridades definieron que darán un aumento salarial del 4.5% a cada médico.
Dicho incremento se comenzará a pagar a partir del 20 de diciembre a los galenos que laboran en el sistema sanitario nacional.
Esta propuesta no fue aceptada por la asamblea del Colegio Médico de Honduras (CMH), ya que la consideran como una falta de respeto para el gremio.
La presidenta del CMH, Suyapa Figueroa, expresó que están abiertos al diálogo y que esperan que el gobierno acepte la deuda que tiene pendiente con ellos.
Figueroa aseguró que van a mantener las asambleas informativas a nivel nacional hasta que el gobierno les ofrezca otra propuesta para el pago de la deuda.
Renuncia
Un total de 25 médicos del Hospital Mario Catarino Rivas y del Hospital Leonardo Martínez, ambos de San Pedro Sula, renunciaron este viernes a sus cargos administrativos y jefaturas de salas y servicios médicos.
Esta es otra medida de presión que tomaron los galenos para exigir el pago de la deuda pendiente. La presidenta del CMH manifestó que están trabajando en otra propuesta para presentarla al gobierno y así llegar a un acuerdo que suspenda el paro de labores a nivel nacional.
“Lo mejor sería resolver el conflicto lo más rápido posible para que no se genere algo mayor”, afirmó Figueroa.
El presidente de la Asociación de Médicos Especialistas del HEU, Dennis Chirinos, comentó que podrían aceptar que en lugar de un 23% de la deuda les paguen un 14%.
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