TEXAS, ESTADOS UNIDOS.- Dolor y conmoción dejó la masacre que acabó con la vida de cinco hondureños en el condado de San Jacinto, Texas, Estados Unidos. En las últimas horas, varios de los sobrevivientes de la misma familia han revelado los momentos de horror y zozobra que vivieron la noche del pasado viernes.
Wilson García, esposo de Sonia Guzmán y padre del pequeño Daniel, de ocho años, dos de las víctimas, brindó una entrevista a Univisión, donde reveló que logró sobrevivir porque se saltó por una ventana de la vivienda.
“Cuando yo me tiré por la ventana, entonces se fue detrás de mí (el tirador), empezó a dispararme y corrí a la parte de atrás. Fueron como cinco disparos que me hizo pero gracias a Dios pegaron en unos árboles”, dijo García.
Entre sollozos y desgarrado por el cruel suceso, el hombre dijo ante los medios de comunicación estadounidenses que fueron 10 las personas que sobrevivieron.
”Se fueron mi hijo de 9 años y mi esposa. Dos personas murieron protegiendo a mi hija de dos añitos y medio y a mi hijo de un mes y medio; lo protegieron con un montón de ropa para que el asesino no lo matara también”, dijo.
El supuesto asesino es un hombre de nacionalidad mexicana identificado como Francisco Oropeza, quien está prófugo de la justicia y tiene un historial violento.
La masacre
La masacre que dejó a cinco hondureños muertos en el condado de San Jacinto de Texas, habría ocurrido por un reclamo de los compatriotas a su vecino, un hombre de nacionalidad mexicana que solía realizar disparos al aire en su jardín.
Así se conoció en las últimas horas, cuando el Condado del Sheriff informó que los compatriotas pidieron al sospechoso, identificado como Francisco Oropeza, de 39 años, parar con los disparos ya que tenían a un recién nacido intentando dormir en su vivienda.
Al parecer, el mexicano, quien supuestamente estaba en estado de ebriedad, se molestó e irrumpió la vivienda de los hondureños para acribillarlos con un fusil AR 15, de grueso calibre.
En el interior de la vivienda habían diez personas, de las cuales cinco murieron y las otras resultaron con heridas graves en su cuerpo.