YORO, HONDURAS.- En las últimas horas, la Cancillería de Honduras informó que el número de hondureños fallecidos en la mortal tragedia dentro de un tráiler en Texas, Estados Unidos, podría subir a cinco, pues dentro del vehículo se encontraron los documentos de la joven Jazmín Nayarith Bueso Núñez, de 37 años de edad.
Hasta el momento no se ha podido determinar si la hondureña, originaria de El Progreso, Yoro, al norte de Honduras, se encuentra entre los fallecidos, pues la información desde la morgue en San Antonio es escasa, al igual que en los hospitales de la zona, por lo que las autoridades hondureñas trabajan para obtener datos de los cuerpos a través de exámenes forenses y pruebas dactilares.
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Sin embargo, los familiares de Jazmín han recibido información que indica que sí pudo haber muerto, además, desde el lunes ella dejó de comunicarse, lo que aumenta su angustia.
“El lunes como a las 11 de la mañana me puso ese audio y me dijo: “Mamá, yo solo quiero que ore fuertemente a Dios, sé que he tenido el respaldo de Dios en todo mi camino, en toda la trayectoria he pasado dificultades, pero he recibido atenciones y me ha ido bien, hasta llegar a Laredo. Nos van a trasladar ya, ore” y eso fue lo último que supo de su hija, según Florencia Núñez, quien entre lágrimas lamentó la forma en la que ocurrieron las cosas.
“Habíamos estado haciendo ayunos en la iglesia, orando por la decisión que ella había tomado, para que todo fuera posible y he visto la mano de Dios y él me ha fortalecido grandemente. Es un dolor que yo no quisiera que alguien más lo pasara, pero es la ley de la vida, Dios así lo ha determinado y no pensé que esto iba a ser tan luego, fue algo inesperado”, agregó la mujer, quien en caso de confirmarse la triste noticia, deberá seguir cuidando del hijo adolescente que Jazmín dejo.
Según su progenitora, el próposito por el que ella se fue era para ayudarla y ayudar a su hijo, además, porque era la única de sus hermanos que no tenía empleo, pues debido a que padecía de lupus había sido despedida y aunque según sus parientes, había intentado emprender un negocio durante la pandemia, fracasó.
Su madre contó que en algún momento le sugirió solicitar una visa, para que no corriera riesgo al irse a Estados Unidos de manera ilegal, pero que ella le respondió muy decepcionada que “en nuestro país no nos escuchan, no me quisieron dar ni mis prestaciones de mi trabajo, ni mi salario”, recordó Florencia entre lágrimas de impotencia.
Por la misma situación de la falta de dinero, fue una amiga quien se ofreció a pagarle el viaje hasta Estados Unidos y Yazmín creyó que por fin había llegado su oportunidad de salir adelante, sin imaginar la tragedia que le esperaba en la peligrosa ruta migratoria.
“Por el motivo de la enfermedad de ella y por el dinero que se estaba pagando yo consideré que tal vez no era un auto de lujo, pero que la iban a llevar en algo que valía la pena”, lamentó su madre.
Ahora, la familia Bueso Núñez espera que se agilice el proceso para identificar el cuerpo de Jazmín o que se le ubique en los hospitales y que si se llega a confirmar su deceso, el gobierno les apoye para traerla de regreso a Honduras y darle sepultura.
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